Alicante inicia el vallado del Observatorio de Medio Ambiente para combatir el vandalismo

El proyecto se redactó en 2021, cuenta con un presupuesto de 221.502,71 euros y un plazo de ejecución de dos meses

Tras su finalización solo quedaría concretar el acondicionamiento de la biblioteca y de una sala polivalente para acoger celebraciones y actividades

Inician las obras en el observatorio de Medio Ambiente de Alicante, un edificio tan singular como abandonado.

Inician las obras en el observatorio de Medio Ambiente de Alicante, un edificio tan singular como abandonado. / HÉCTOR FUENTES

Lydia Ferrándiz

Lydia Ferrándiz

La ciudad de Alicante inicia una nueva fase en la larga travesía de revitalización de su Observatorio de Medio Ambiente. El edificio, erigido en 2012 con fondos Feder bajo el Plan Urban 2007-2013, ha sido objeto de múltiples desafíos desde su concepción. La última intervención, que se ha iniciado esta semana y que se espera completar en dos meses, busca cerrar la historia de vandalismo que pesa desde años sobre el Observatorio, gracias a la instalación de un vallado perimetral que permitirá mejorar la seguridad de un espacio de un espacio que está situado en el eje central de la Vía Parque (avenida Unicef), junto a las piscinas y las inmediaciones del parque Lo Morant. 

El proyecto, redactado en octubre de 2021, cuenta con un presupuesto total de 221.502,71 euros, y en él se contempla una actuación en dos fases. La primera supone la mejora de la seguridad de con un vallado perimetral de dos metros de altura formado por módulos de barras verticales de acero galvanizado en caliente, además de dos puertas automáticas sobre guía de control de acceso para el personal autorizado de otros dos metros de altura desde el suelo en material de acero galvanizado en caliente. Así como unas barandillas iguales a las existentes para limitar el acceso en la zona de cubierta del edificio.

La actuación municipal ya recogía en los pliegos que las instalaciones presentaban “un estado de vulnerabilidad por cualquier ajena que puede acceder al complejo, simplemente cruzando un paso de cebra. De hecho las instalaciones han sufrido actos de vandalismo que no se han podido atajar en el mismo momento, por la falta de seguridad en todo el entorno”. Por ello, se incluirán también cámaras de vigilancia en las instalaciones.

En la actualidad, el Observatorio presenta daños en cristaleras, donde por ejemplo se han puesto maderos para proteger el interior del centro. Además, están deterioradas las zonas exteriores en el entorno del futuro salón al aire libre. Hay diversas pintadas y, en clave de humos, el personal del departamento ha colocado carteles indicando: “sonríe te estamos grabando”. Además de que la zona verde de alrededor presenta áreas con el riego al aire secas. 

Una vez concluida esta fase, el objetivo del Consistorio es acometer una actuación mediante la cual se pondrá en marcha de biblioteca, salón de actos y sala de exposiciones -al aire libre- y que permitirá incrementar las actividades.

Una de las cristaleras rotas del Observatorio de Medio Ambiente con el cartel "sonríe te estamos grabando".

Una de las cristaleras rotas del Observatorio de Medio Ambiente con el cartel "sonríe te estamos grabando". / HÉCTOR FUENTES

Una iniciativa que viene de lejos

Estos más de 200.000 euros representa un nuevo suma y sigue en una infraestructura municipal que comenzó por la ruptura del contrato entre la empresa y el consistorio en 2016, cuatro años después de empezar unas obras que deberían haber durado un año. Este abrupto final se tradujo en una sentencia condenatoria para el Ayuntamiento alicantino. Fueron 80.000 euros más sobre un coste inicial de más de 700.000 euros y donde la mala ejecución ocasionó unas pérdidas de fondos europeos. 

Posteriormente, ya con el tripartido encabezado por los socialistas se aprobó un modificado de 27.000 euros. En 2018, cuando el Observatorio llevaba un año abierto parcialmente, se topó con nuevos arreglos, porque un informe de seguridad y salud encargado por la propia administración local indicó desde goteras, humedades y riesgos para usuarios, entre otros. 

El último intento por resucitar el esplendor se aprecia en que el contrato pertenece a un proyecto redactado por la Concejalía de Medio Ambiente el 29 de octubre de 2021 y aprobado en Junta de Gobierno Local el 9 de noviembre de 2021, es decir, hace dos años. No obstante, es relevante que se tomen medidas para poner fin a los actos de vandalismo que sufre el entorno y el propio edificio. Los daños por vandalismo los cifró en 27.500 euros el concejal de Medio Ambiente, Manuel Villar, entonces.

Hoy este espacio es la sede del departamento de Educación Ambiental municipal donde se imparten talleres, exposiciones y se planifican actividades para el curso escolar, pero su potencial de usos sigue marcado por la infrautilización. 

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