El quiosco del nuevo Portal de Elche convence a los vecinos de Alicante

Quienes se han acercado a conocer el resultado de la reforma se muestran satisfechos con el diseño y las novedades, que tratan de respetar al máximo el entorno y la arquitectura original

Alejandro J. Fuentes

Alejandro J. Fuentes

Nueva vida para el quiosco del Portal de Elche, en el centro de Alicante. El establecimiento hostelero de la histórica plaza alicantina estrena una nueva imagen después de varios meses en obras. Eso sí, lo hace manteniendo la esencia arquitectónica de sus orígenes (cuando funcionó como una heladería en la década de los 70) y respetando buena parte de los materiales originales.

La remodelación ha sido impulsada por la empresa responsable de la explotación del quiosco, Herga Hostelería, que pagará un canon de 1,8 millones por diez años de concesión. El grupo que gestiona conocidos locales como Soho o Baviera ha impulsado una renovación integral en la que destaca una nueva tarima de madera sobre la que se ubican unas novedosas pérgolas acristaladas, que sustituyen a las anteriores sombrillas. Estos elementos protegen las mesas de la caída de hojas y ramas de los ficus al mismo tiempo que permiten el paso de la luz natural, sin tapar la vista de los majestuosos árboles. Además, la parte metálica de la estructura mantiene la misma línea que el techado del quiosco central, dotando de mayor armonía al conjunto.

Entre las novedades también destaca una remodelación del establecimiento hostelero en la que ha primado el estilo original, donde diversas instalaciones como neveras y demás maquinaria se han integrado en el espacio recubriéndose con azulejos originales del edificio, para que pasen lo más desapercibidas posible. Los responsables del servicio, Jesús y Javier Gallego, han explicado que la intención de los trabajos era «que el Portal de Elche no pierda su singularidad como uno de los pulmones verdes del centro de la ciudad» pero que, al mismo tiempo, «siga convirtiéndose en un punto de encuentro e impulse la hostelería como uno de los ejes del turismo en Alicante».

El resultado final: un espacio público que, pese a su ocupación privada destinada al uso hostelero, respeta tanto su diseño original como su conexión con el entorno, tratando de demostrar que las actuaciones urbanísticas de este tipo pueden llevarse a cabo sin que suponga un perjuicio para el patrimonio urbano y natural de la ciudad. Así lo han destacado buena parte de los vecinos y turistas que se acercaron este jueves a conocer la nueva plaza, que se mostraron encantados con el nuevo diseño del Portal de Elche.