Vuelve la procesionaria al castillo de San Fernando en "pleno invierno"

Los vecinos afectados denuncian los peligros para la salud pública de no tratar esta plaga en zonas naturales de la ciudad a las que acuden diariamente cientos de personas a utilizar sus instalaciones

Procesionaria junto al parque infantil del Tossal.

Procesionaria junto al parque infantil del Tossal. / INFORMACIÓN

Lydia Ferrándiz

Lydia Ferrándiz

Vuelve la plaga de procesionaria al Tossal. Esta "primavera anticipada" que vive la ciudad de Alicante no solo ha traído consigo el buen tiempo y las temperaturas agradables, sino que ha dado el pistoletazo de salida a un problema que cada año llega antes: la proliferación de la plaga de procesionaria del pino en las zonas verdes de la ciudad. Estos insectos, que pueden observarse estos días tanto en forma de bolsas como de hileras de procesionaria, ya forman parte de la imagen de los senderos que recorren el entorno del Castillo de San Fernando o los más próximos a sus zonas de juegos infantiles.

En concreto, el parque infantil junto a la Ronda del Castillo es una de las zonas en las que esta plaga se ha asentado y donde cientos de orugas han comenzado a infestar los pinos. En su entorno pueden verse estos días a las orugas en fila india, con el consiguiente problema de salud que puede generar si uno las toca, ya que producen fuertes reacciones alérgicas, especialmente entre los más pequeños y las mascotas que pasean de forma diaria por este entorno. Incluso esta plaga ha llegado al colegio La Aneja donde escolares se encontraron en el patio a la hora del recreo en una de las pistas de baloncesto una hilera de estas orugas.

Y es que estas bolsas copan los pinos de esta zona y de la Ronda del Castillo de San Fernando. Ante esta situación, y en respuesta a preguntas de este diario, desde el Ayuntamiento de Alicante señalan que los tratamientos para controlar la procesionaria del pino están "programados anualmente". "El año pasado ya hubo poca y este año apenas hay, el calor parece que está cambiando el ciclo y como cada vez se hace más prevención hay menos al no dejar que las orugas completen el ciclo", aclaran desde el Consistorio.

Pese a los tratamientos, un paseo por la zona permite ver decenas de orugas arrastrándose por el suelo o por los pinos, una circunstancia que tiene indignados a los vecinos de la zona. "Sabemos que es lo típico, pero no nos lo esperábamos tan pronto", comenta Marta Asenjo, vecina de la zona. "Los que solemos venir por esta zona nos vamos dando avisos o enviándonos fotos para ver cómo está la situación. Es importante llevar cuidado estos días, sobre todo para la gente que viene con niños pequeños o con perros porque hay bastante procesionaria por el calor", aclara Asenjo.

Del mismo modo se encuentran aquellos que pasean a sus mascotas, y que están preocupados por si entran en contacto con las orugas y sufren alguna reacción alérgica que pueda serles perjudicial. "Me avisaron sobre todo gente que viene muy pronto por la mañana a pasear al perro por algunos de los senderos más próximos al parque para que tuviéramos cuidado porque las orugas van cruzando los caminos de un lado a otro es normal verlas por el suelo", asegura Alejandro Vázquez. "Vengo a pasear a mi perro todos los días a esta zona y para ellos es muy peligroso porque si huelen la oruga o la tocan se les pone la cara como un tomate y son muy alérgicos, tenemos que llevar cuidado con las mascotas porque aunque es muy pronto y no la esperábamos aún la procesionaria ya ha llegado", apunta Vázquez.

Cartel de tratamiento antiplagas en el Tossal.

Cartel de tratamiento antiplagas en el Tossal. / PILAR CORTÉS

En este contexto, la Asociación Nacional de Empresas de Sanidad Ambiental (Anecpla) ha urgido a todas las administraciones locales para que implementen campañas de prevención anuales durante la temporada de otoño, anticipándose a los efectos del cambio climático y los riesgos asociados con la proliferación temprana de la plaga. Así se ha expresado el director general de esta ANECPLA, Jorge Galván, quien señala que, una vez se comprueba el adelanto de la plaga "debido a los efectos del cambio climático", resulta "imprescindible" que la población se adelante "a los peligros que puede llegar a ocasionar".

Además, este año, según los informes de Conselleria de Medio Ambiente, existe un ligero aumento de la infestación por procesionaria, continuando así con una tendencia al alza que comenzó en 2021. En particular, la provincia de Alicante muestra una situación relativamente mejor, con solo un 6,5 % de su superficie afectada, en contraste con el 9 % de la media autonómica. También incluye que las superficies en niveles medios en Castellón son las más elevadas, representando el 9,6 % del total de la superficie prospectada en cada provincia. En medio de las dos anteriores, se encuentra València, con un 9,1 % de superficie con el nivel intermedio de afección, según la Conselleria de Medio Ambiente. 

La Conselleria de Medio Ambiente incluye que en la prospección efectuada en el año 2023, los niveles bajos constituyen, como suele ser habitual, un porcentaje muy elevado de la superficie prospectada, concretamente un 90 %, mientras que los niveles medios representan tan solo un 9 %. Según indica el informe de la Conselleria, en el año 2023 se ha mantenido la tendencia al aumento de los niveles de infestación iniciada en 2022, tras varios años consecutivos de descenso. En 2022, se habían registrado 12.481 hectáreas (2,6 % de la superficie prospectada), señala.