Vuelven las obras una década después al solar del antiguo hotel El Cabo

Ahora parece que sí: viviendas de lujo en una de las zonas más privilegiadas de la ciudad de Alicante. En primera línea, en la zona del Cabo de la Huerta, en un solar donde hace una década se suspendió la construcción de un proyecto urbanístico rodeado de polémica por la sombra proyectada sobre la arena.

En julio de 2014, el Ayuntamiento de Alicante paralizó la construcción de un edificio de ocho plantas y trece viviendas que comenzó a levantarse en el solar del antiguo Hotel El Cabo, en primera línea de la playa de San Juan, al detectarse que las obras no se ajustaban a la licencia concedida porque, entre otras cuestiones, superaban la altura permitida. 

Ahora, diez años después, han regresado los operarios al solar, donde se llegó a construir solamente la estructura del edificio, junto al terreno que en su día acogió al hotel Sidi San Juan. La promotora urbanística, según fuentes de la Concejalía de Urbanismo, consiguió la licencia de demolición de la estructura actual a finales de 2023. Actualmente, sigue "vigente", según confirman las mismas fuentes, la licencia de obra mayor para cinco viviendas unifamiliares, concedida en junio de 2019. La promoción, Menorca Premium residencial, está impulsada por la Clínica Menorca, desde donde se han limitado a asegurar que está "todo vendido".

La suspensión de la obra, en 2014, se tomó a raiz de inspecciones realizadas por técnicos municipales tras denuncias vecinales que se basaban en informes técnicos para asegurar que el inmueble iba a proyectar sobre la arena de la playa una sombra superior a la permitida por el Plan General, vigente desde 1987. Los vecinos aludían al artículo 141 de las normas urbanísticas, que recoge que "ninguna edificación producirá sombra sobre los espacios calificados como playa durante el equinoccio de otoño, desde las 8 de la mañana a las 4 de la tarde en horario solar".

En la inspección, los técnicos determinaron que las obras realizadas no se ajustaban a la licencia concedida en cuanto al retranqueo y la altura, ya que uno de los sótanos había sido ampliado a planta baja. Fuentes urbanísticas explicaron que, al superar la altura en uno de los sótanos hasta convertirlo en planta baja y en algunos forjados, la altura total del edificio se vería incrementada en alrededor de una planta. Esa situación impedía que se cumplieran los criterios establecidos en la licencia municipal y el propio proyecto presentado, por lo que tampoco queda garantizado que la proyección de la sombra sobre la arena de la playa cumpla lo que establece el PGOU.

Se trata de unas obras que, con todo, ya arrastraron polémica antes de su paralización hace una década. Y es que la propia Fiscalía de Medio Ambiente pidió al Ayuntamiento el expediente del proyecto después de que la plataforma Salvem el Cabo pusiera en duda la legalidad del inmueble en cuanto a la proyección de sombras sobre la arena. Los vecinos también cuestionaban el procedimiento de aprobación del proyecto que los técnicos municipales rechazaron en primera instancia para aprobarse después en agosto del pasado año.

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