En una actuación de la que apenas existen precedentes, la concejalía de Urbanismo concedió licencia en pleno verano y con algunos de los técnicos municipales de vacaciones, para la construcción de un edificio de ocho plantas y 13 viviendas en primera línea de la Playa de San Juan, en la parcela que ocupó el hotel El Cabo, apenas unos meses después de que la propia Concejalía denegara oficialmente la licencia mediante un decreto en el que se relacionan hasta un total de 17 incumplimientos. Las obras para la edificación del inmueble ya se han iniciado.
La singularidad de este asunto estriba en que se ha tramitado mediante dos expedientes completamente distintos. El primero, resuelto mediante decreto de la concejalía de Urbanismo y firmado por su titular, Marta García Romeu, deniega la licencia tras más de un año de trámites al no subsanar la promotora, Inversiones A.M. 2000, los numerosos reparos de los técnicos municipales. Contra esta resolución municipal solo cabe recurso contencioso-administrativo. El segundo expediente, y aquí radica la excepcionalidad del caso, arranca apenas unas semanas después, cuando la promotora vuelve a pedir licencia para el mismo edificio. Al tratarse de una nueva petición, se tramita de forma independiente a la petición anterior, y en apenas tres meses obtiene todas las bendiciones municipales, mediante decreto suscrito también por la titular de Urbanismo municipal. Este segundo expediente se tramita en pleno verano y estando de vacaciones algunos de los técnicos que pusieron los reparos que dieron lugar a la denegación de la licencia.
Los antecedentes de este proyecto se remontan al año 2003 cuando el Ayuntamiento concede permiso a la promotora citada, radicada en Madrid, para rehabilitar el hotel de El Cabo. Un año más tarde la mercantil cambia de idea y solicita destinar el inmueble a viviendas, pero se tropieza con el veto de Costas al ocupar parte del inmueble la zona de servidumbre marítimo terrestre.
Las gestiones de la mercantil no cejan mientras se deteriora el antiguo hotel de El Cabo, lo que obliga al Ayuntamiento a ordenar su demolición, cosa que se lleva a cabo en diciembre de 2009 por orden de la concejalía de Imagen Urbana.
Posteriormente, el 11 de marzo de 2011 la promotora vuelve a presentar licencia para un edificio de 13 viviendas distribuidas en ocho plantas, tres más de las que tenía el hotel El Cabo, aunque asegura que respeta la condición de no sobrepasar la edificabilidad del citado hotel. Esta petición se le deniega en la primavera de 2012, al no subsanarse los múltiples reparos de los técnicos municipales. Sin embargo, semanas después la promotora vuelve a solicitar licencia y la obtiene sin ningún reparo el 3 de septiembre de 2012, tras una tramitación en verano y con algunos de los técnicos que pusieron reparos de vacaciones.
