El Archivo de Crevillent rescata detalles de La Pasión de 1890

El Archivo Municipal de Crevillent ha sacado a la luz una crónica de la Semana Santa de 1890 en una época que coincidía con la llegada al municipio alfombrero de las obras de Antonio Riudavets o Pérez Figueroa, gracias al esplendor económico de la industria esterera y de los diferentes gremios. En aquellos tiempos las procesiones ya contaban con sus elementos más característicos, como son la música o las bandas locales y foráneas venidas de Almoradí, Alicante o Santomera, así como los coros que acompañaban a las distintas cofradías. 

Viernes Santo

Tal y como ha podido conocer el Archivo, de estos documentos se desprende que ese año en el último tercio del siglo XIX la procesión del Viernes Santo tuvo que ser suspendida por la mañana debido a las inclemencias meteorológicas.

«Tenemos que creernos el potencial de tener una Semana Santa de Interés Turístico Internacional»

Lluvia

Con las lluvias los pasos fueron retirados rápidamente del Calvario. Aquel mismo año, hubo novedades en las procesiones. Entre ellas, el Santísimo Cristo de la Caída, además del coro, estrenaba un grupo de alabarderos (elemento genuino crevillentino), proyecto a cargo de Vicente López, Vicente Sánchez y Manuel Lledó, capitán, abanderado y teniente respectivamente, que lucieron «magníficos trajes», como se describe en la documentación a la que ha tenido acceso el archivo municipal.

Trajes

También se describen como «magníficas cotas de malla, cascos relucientes y con plumajes vistosos, blancos por remate, pantalones encarnados ajustadísimos, largas y relucientes lanzas, y los mantos que pendían al hombro» los trajes de los participantes en La Pasión. 

Virgen de los Dolores

Desde el departamento municipal indican que ese ejercicio fue numeroso el acompañamiento de mujeres a la Virgen de los Dolores y en la cofradía de la Negación de San Pedro. El Sábado Santo se celebró la Resurrección de Cristo con tiros en todas direcciones, semejando un simulacro, pero con balas, lo que provocó un herido en un brazo. 

Con todo, resaltan que a pesar de las particularidades, hace más de 130 años, la Semana Santa de Crevillent se configuró tal y como hoy se conoce, y era apreciada y conocida en toda la geografía española y se hacían eco de ello los diferentes medios de comunicación escritos.