La Vila Joiosa, peix, xocolate i Desembarc

La Vila Joiosa no sólo se caracteriza por sus casas de colores que conforman su pintoresco centro histórico y la fachada litoral, sino que también forman parte de su idiosincrasia la pesca y la industria del chocolate. Estos sectores no son sólo su motor económico sino que han definido una gastronomía propia. El pescado de kilómetro cero, que traen los marineros cada tarde a la lonja del puerto, ha diseñado una cocina marinera que se mantiene generación tras generación, tanto en los hogares como en los restaurantes del municipio. Son típicos los platos de arroz con todo tipo de pescado fresco, además de que el puerto de La Vila Joiosa presenta unas variedades propias como la gamba blanca y el denominado «revuelto», compuesto por salmonete, pescadilla y palaya. 

La gastronomía forma parte del estilo de vida vilero y se ha convertido en un reclamo turístico más, junto con las 13 playas y calas bañadas por el plácido mar Mediterráneo. Además de que dispone de un clima envidiable, su oferta gastronómica invita a visitar el municipio en cualquier época del año. 

Este año, se cumple la 24 edición de La Vila Gastronómica, un certamen de actividades que organiza el Ayuntamiento con la colaboración del sector hostelero y chocolatero. Y es que La Vila Joiosa se visita y se disfruta todo el año. 

Gastronomía

La Vila Gastronómica rediseña en 2024 su agenda y su proyección al incorporarse, además, en la marca L’Exquisit Mediterrani que promueve Turisme Comunitat Valenciana. El calendario gastronómico arranca con la Mostra de Cuina Marinera, en la que los restaurantes de la localidad ofrecen un menú elaborado con el pescado fresco de la bahía y el chocolate de las firmas vileras. Se trata de la puesta de largo de la gastronomía vilera, puesto que la gran variedad de platos que ofrecen los menús oscilan desde los más tradicionales a los más vanguardistas. Del 8 al 17 de marzo, los paladares más exquisitos se deleitarán con los menús delicadamente elaborados en los que el protagonista será el pescado. 

Para disfrutar de la primavera, del 24 de mayo al 2 de junio, se organizarán las jornadas Con G de Tapas, en las que los bares de la ciudad ofrecerán tapas típicas y sofisticadas elaboradas con productos de kilómetro 0. 

Para dar la bienvenida al verano, las cocinas vileras prepararán el típico plato del verano: la pebrereta. Se trata de una de las recetas más representativas de la gastronomía vilera y se compone de pimiento verde, calabaza, tomate y sangacho (una parte del atún que se conserva en salazón). Entorno a este plato, se organizarán diversas actividades, como su concurso popular, arraigado en el barrio del Poble Nou, y novedades como degustaciones y la oferta de menús en los restaurantes que incluirán este tradicional plato. A las puertas del otoño, los aficionados a la enología tienen una cita en la Mostra del Vi Mediterrani. Una gran variedad de bodegas ofrecerán catas y degustaciones para mostrar sus caldos. 

Seguidamente, el arroz tomará el relevo en el calendario con la celebración de la Setmana de l’Arròs, del 18 al 27 de octubre. Durante estos días, los restaurantes volverán a diseñar un espectacular menú con un plato principal de arroz, que mostrará las peculiaridades de la cocina vilera. 

Ciudad del chocolate

Y a las puertas de la Navidad, llegará la jornada más dulce: la Xocolatíssima. Del 18 al 24 de noviembre, La Vila Joiosa se convertirá en la ciudad del chocolate, puesto que las firmas chocolateras participarán en diversas actividades, tales como degustaciones, talleres y presentaciones de producto que harán las delicias de todos los públicos. Y es que La Vila Joiosa mantiene una tradición de industria chocolatera de más de dos siglos. Además de albergar fábricas de chocolate, dispone del Museo Valenciano del Chocolate, de Chocolates Valor, uno de los museos más visitados en España que registra más de 100.000 visitantes al año. Ningún turista se marcha del municipio sin haber visitado los museos de Chocolates Valor y de Chocolates Pérez.

Fiestas

Considerada destino de turismo gastronómico de calidad, otro de los elementos que caracteriza el estilo de vida de la localidad es la celebración de sus fiestas patronales en honor a Santa Marta, declaradas de Interés Turístico Internacional en 2003. La agenda gastronómica da un salto en el verano porque del 24 al 31 de julio se celebran las fiestas de Moros y Cristianos. 

Además de contar con espectaculares desfiles y embajadas, presentan un acto único en el mundo, que tiene como escenario el mar Mediterráneo. La madrugada del 27 al 28 de julio se celebra el Desembarco. Un espectáculo en el que se combinan la música, la pólvora y el mar para representar, en la playa centro, la recreación histórica de los hechos que acontecieron el 29 de julio de 1538. Una veintena de barcas sarracenas llegan a la orilla, donde los festeros del bando moro se tiran al mar para luchar contra los cristianos que en la playa les esperan. La historia se convierte en el acto central de las fiestas, que datan de finales del siglo XIX. Es un acontecimiento que no se puede contar, hay que vivirlo en primera persona y disfrutar de una experiencia inolvidable.