El entrenador del Alcoyano, Vicente Parras, sigue molesto con el desenlace del partido de su equipo el sábado, en El Collao, y vuelve a señalar al colectivo arbitral como factor determinante que condiciona la competición. El técnico alicantino está muy dolido por las decisiones del madrileño Fernando Bueno Prieto que dirigió el enfrentamiento del sábado frente al Barcelona B que terminó con el marcador de 2-3 y que rompió una racha de cinco jornadas sin perder de los alicantinos, al asegurar que «vende más un duelo de filiales que un Alcoyano-Sanluqueño».

Parras, muy crítico con la protección que los árbitros hacen de los jugadores de los filiales en la Primera RFEF, se mostró muy explícito a la hora de calificar la actuación arbitral vivida en el encuentro de anoche, e indicó que "no se puede defender con la mirada" a la hora de referirse a la permisividad encontrada por los jugadores del filial azulgrana.

El técnico del Alcoyano cree que «los que vamos por otro camino, llevamos las de perder» y mencionó que la principal preocupación de los colegiados cuando arbitran en el Collao es «que cualquier acción está condicionada a que no se le vaya el partido de las manos», para añadir que «su reacción es cortarla de raíz».

Piensa que con esa actitud «los únicos que tenemos todas las de perder somos nosotros, que somos un equipo intenso y físico hasta dónde nos dejan hacer. En el momento que el público se viene arriba en un campo como El Collao, no hay dudas y cortan por los sano», indicó.

Vicente Parras no tiene dudas de que un alto porcentaje de la derrota del sábado frente al Barcelona B la tuvo el arbitraje con su permisividad y consideró que fue «clave» el arranque de la segunda mitad, con esos cinco minutos en los que el filial azulgrana se benefició de la «amenaza» de «tener tarjetas y ser expulsados» y le dieron la vuelta al marcador.

«Solo así ellos pudieron salir cómodamente de la presión y conectar con sus hombres importantes de arriba. No puede ser que los árbitros vengan a El Collao con la única idea de que no se le vaya el partido de las manos. A nosotros nos condiciona mucho», finalizó.

En esa misma línea, el defensa del Alcoyano Pablo Carbonell dijo que no entiende la permisividad por parte de los árbitros con los equipos filiales que militan en la Primera RFEF, ya que considera que en el partido ante el Barcelona B en El Collao tuvo la sensación de que jugaban fuera de casa.

Carbonell, uno de los tres capitanes de la plantilla del Alcoyano, cree que se les «sobreprotege demasiado« por parte de los árbitros, hasta el punto de confesar que no parecía que estábamos jugando en El Collao, «un campo en el que la afición se deja notar y mucho», añadió.

El defensa no culpa de la derrota por 2-3 frente al Barcelona B al colegiado del encuentro pero sí entiende que marcó «mucho» el desarrollo del choque. «Nos añadió más presión cuando nosotros jugábamos en casa con una serie de faltitas y amarillas para protegerles. Cuando terminó el partido el vestuario estaba bastante caliente por todo lo sucedido», enfatizó.