El Consell inicia los trámites para crear cuatro estaciones de ITV fijas en la provincia

La segunda y última fase de la reversión, que incluía a Alicante y Elche, se completa sin incidencias

Vehículos a las puertas de la ITV de Alicante.

Vehículos a las puertas de la ITV de Alicante. / HECTOR FUENTES

M. Vilaplana

M. Vilaplana

La Conselleria de Economía, a través de la Sociedad Valenciana de ITV (Sitval), ha iniciado los trámites para la creación de cuatro nuevas estaciones fijas en la provincia de Alicante. Pese que todavía no se ha adoptado una decisión definitiva, está previsto que estas instalaciones surjan, al menos en parte, de las unidades móviles repartidas por diferentes puntos del territorio. Todo ello dentro del proceso de reversión que se completó este lunes, sin incidencias, con una segunda y última fase en la que estaban incluidas las estaciones ubicadas en Alicante y Elche.

Sitval llevó a cabo la semana pasada la primera fase de la reversión, lo que supuso que pasaran a titularidad pública las estaciones de Alcoy, Benidorm, Torrevieja, Villena, Redován y Orihuela. Este lunes le correspondía el turno a Alicante y Elche, en una operación que, según el conseller de Economía, Rafa Climent, «se ha realizado con total normalidad. Así que todos aquellos que vaticinaban poco más que un terremoto han visto ahora cómo sus pronósticos han fallado y la transición se ha podido consumar sin problemas».

El objetivo prioritario está depositado, ahora mismo, en reanudar cuanto antes la actividad en las unidades móviles de Calp, Santa Pola y El Campello, cuyas instalaciones, propiedad de las empresas concesionarias, ya han sido desmontadas, y tendrán que ser sustituidas por otras propiedad de la Generalitat.

Sitval, mientras tanto, ya trabaja en su objetivo de poner en marcha cuatro estaciones fijas más en la provincia, de las doce que están programadas en el conjunto de la Comunidad Valenciana. Pese a que todavía no se han concretado los municipios en los que se podrían ubicar, Climent señala que el objetivo es que estas estaciones presten servicio en l’Alacantí, la zona de las Marinas, el Vinalopó y la Vega Baja. En este sentido, está previsto que, al menos una parte de las mismas, sustituyan a algunas de las unidades móviles actuales. «Es algo que todavía tenemos que analizar, y también ver la disponibilidad por parte de los ayuntamientos», subraya.

La filosofía, añade Climent, es acercar el servicio a los usuarios. Según sus palabras, «no queremos que haya ningún municipio situado a más de 30 kilómetros de distancia de una ITV o, lo que es lo mismo, a más de media hora».

Con la reversión completada este lunes, por otro lado, la Generalitat ya ha asumido a los cerca de 1.200 trabajadores, 470 de ellos de la provincia, que hasta ahora estaban a cargo de las concesionarias. De entrada, se les van a respetar los salarios y condiciones laborales, mientras se adecuan al marco del sector público.