Las exportaciones alicantinas encadenan ya cinco meses consecutivos de caídas

Las exportaciones alicantinas no levantan cabeza, lastradas por el complicado momento que vive la industria del calzado y el resto de sectores más directamente vinculados al consumo, como el textil o el juguete, además de algunos fabricantes de bienes intermedios, como son los productores de aluminio. Así lo han vuelto a certificar los datos de noviembre, que por quinto mes consecutivo registra un descenso de ventas de las empresas de la provincia al exterior.

De acuerdo con la información del ICEX, los envíos de las firmas alicantinas a otros países sumaron ese mes 585,7 millones de euros, lo que supone un retroceso del 7,3% con respecto al mismo periodo de 2022. Una caída algo más pronunciada que la contabilizada a nivel nacional, que anotó un descenso del 6,7%, hasta los 34.878 millones, según las mismas fuentes.

Con estas últimas cifras, el acumulado entre enero y noviembre alcanza los 6.447 millones de euros, solo un 1,09% menos, gracias a que durante la primera parte del ejercicio siguieron aumentando las exportaciones, por a la inercia que se arrastraba del año anterior.

Calzado

Por sectores, la situación más preocupante es la que vive el calzado, sobre todo por su peso en la economía provincial y también en el conjunto de las exportaciones, ya que este sector por sí solo representa aproximadamente una quinta parte de todo el comercio exterior alicantino. Sin llegar a la caída de más del 40% que acusó en el mes de octubre, las cifras de noviembre volvieron a ser muy negativas. Los empresarios del Vinalopó vendieron por valor de 77,6 millones de euros, lo que supone un 23% menos que el mismo mes de 2022.

Esto deja el acumulado del año en 1.113 millones de euros, un 9,1% menos. O dicho de otra forma, solo en lo que va de año el sector ya ha perdido 113 millones de euros en ventas en los mercados extranjeros.

La presidenta de la Asociación Valenciana de Empresarios del Calzado (Avecal), Marian Cano, recuerda que desde la patronal ya advirtieron de la situación. "El primer semestre del año fue positivo, pero sabíamos que esta tendencia se iba a invertir como consecuencia, principalmente, de la pérdida de poder adquisitivo de las familias que está repercutiendo en las ventas del calzado, al no tratarse de un producto de primera necesidad, como puede serlo la alimentación", señala. Y lo peor es que las previsiones para 2024 apuntan en la misma dirección, ya que a la atonía del consumo hay que sumar otras dificultades, como "la situación geopolítica internacional, con el conflicto en Gaza y ahora la crisis en el mar Rojo, que está obligando a las empresas a fijar nuevas rutas, con lo que supone de incremento de los costes del transporte y retrasos en los pedidos".

El calzado intensifica la promoción exterior ante el retroceso de las exportaciones

Una situación que también impacta de lleno en las exportaciones de otros sectores directamente vinculados con los presupuestos familiares, como el textil o el juguete, que anota una caída del 24% en noviembre, con 11,8 millones exportados, y del 15,1% en lo que va de ejercicio, con unas ventas totales de 125 millones.

También siguen en terreno negativo otras industrias como el mármol, que ve descender un 21% el envío de piedra en bruto, hasta los 3,5 millones en noviembre, y un 1,8% el de producto elaborado, con envíos por valor de 8,8 millones.

Del mismo modo, la industria del aluminio registra uno de los mayores descensos –un 24% sobre noviembre del año pasado, con 22,9 millones- debido a que, a los menores pedidos, hay que sumar la caída del precio de este material.

Agricultura

En cuanto a la situación del sector agrario, una de cal y otra de arena. Por un lado, la venta de hortalizas se incrementó un 10,2% sobre el mismo mes de 2022, con 53,5 millones, aunque el presidente de Asaja Alicante, José Vicente Andreu, señala que buena parte de estas exportaciones no responden a cultivos de la provincia, sino a los envíos de productos de otras zonas de España que realizan los exportadores alicantinos. "En noviembre, la temporada de la verdura de invierno aún no ha empezado en Alicante", recalca.

Por su parte, los envíos de frutas se contrajeron un 9,7%, hasta los 66,7 millones, arrastrados por las menores ventas de almendras –"hay sobreproducción en California y eso ha reducido la demanda de producto español", apunta Andreu- y la menor cosecha de clementinas.

El peso de la industria alicantina se desploma: aporta al PIB provincial la mitad que hace 20 años

En el terreno positivo, destaca la mejora que experimentan la exportación de maquinaria (+15,5%) o la de muebles (+10,2%), aunque en este último caso no logra compensar los datos de meses anteriores, por lo que la cifra anual sigue en terreno negativo.

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