Hachazo a la pesca: la UE aumenta de 15 a 45 los días de paro y deja sin rentabilidad al sector alicantino

Los barcos de arrastre solo podrán salir a faenar 125 jornadas este año frente a las 240 de las que disfrutaban hace cinco. Indignación en las cofradías ante una propuesta tan agresiva

Pescadores de Santa Pola distribuyendo las capturas durante una jornada de faena.

Pescadores de Santa Pola distribuyendo las capturas durante una jornada de faena. / Áxel Álvarez

M. Vilaplana

M. Vilaplana

Sin margen de rentabilidad. Así se ha quedado la pesca de arrastre en la provincia de Alicante tras conocer que el recorte por parte de la Unión Europea (UE) en los días para salir a faenar será finalmente de 45, en lugar de los 15 que se calculaban inicialmente. Todo un hachazo para el sector, que ha recibido con indignación una medida por medio de la cual las embarcaciones solo podrán trabajar 125 jornadas este año, frente a las 240 de las que disfrutaban hasta hace cinco. La medida, advierten desde las cofradías, no va a afectar solo a los trabajadores de la flota, sino que también se van a tener que plantear reducciones en el personal de tierra, al caer de forma considerable el volumen de actividad.

La UE, basándose en criterios de sostenibilidad, viene aplicando desde 2020 una agresiva política de recortes para la pesca de arrastre del Mediterráneo occidental. Con todo, ha sido este año cuando el tijeretazo ha sido más drástico, según la notificación que acaba de recibir el sector por parte del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación. Y es que si inicialmente se especulaba con que la reducción pudiese ser de alrededor de 15 días, finalmente las embarcaciones pasarán de las 170 jornadas del año pasado a apenas 125 en el actual.

Así lo ha señalado el secretario de la Federación Provincial de Cofradías de Pescadores de Alicante, Juan Mulet, quien destaca que “se ha dejado una reserva de un 10 %, es decir, de unos 12 días, que se podrían utilizar dependiendo de diversas circunstancias, como la posibilidad de que apareciese alguna embarcación nueva. Pero, de cualquier forma, el recorte es una auténtica barbaridad, que nos deja totalmente contra las cuerdas y sin ningún tipo de viabilidad”.

Y la explicación, destaca el portavoz del sector, es muy sencilla. Según sus palabras, “ninguna empresa puede mantenerse trabajando solo 125 días al año, ni tan siquiera recibiendo ayudas”, asevera. Y es que las compensaciones, añade, solo van a parar a los armadores. “Los trabajadores van consumiendo el paro mientras se encuentran inactivos, y algunos de ellos ya lo han agotado. De esta forma es totalmente imposible subsistir”, lamenta.

En la provincia son 120 las embarcaciones dedicadas al arrastre, que en su conjunto emplean a unos 600 trabajadores. Mulet, con todo, advierte de que el fuerte recorte aplicado este año también va a tener consecuencias sobre el personal de tierra de las cofradías, que previsiblemente tendrá que reducirse como consecuencia de la caída del volumen de trabajo. “No sabemos el alcance, cada cofradía tendrá que sacar sus números”, destaca.

En parecidos términos se expresa José López, patrón mayor de la Cofradía de Santa Pola, en cuyo puerto fondean 36 embarcaciones de arrastre. “La actividad -explica- se ha vuelto ahora mismo inviable, porque las compensaciones, además de insuficientes, llegan tarde y mal. De hecho, las del año pasado no se han pagado todavía, al margen de que hay algunas pendientes de 2022”.

Coincide con Juan Mulet con el problema del agotamiento de los días de paro por parte de los marineros, así como con la necesidad de recortar personal en el puerto, sin que de momento se haya concretado la proporción. Pero va más allá, destacando que estos tijeretazos también acaban afectando a las pescaderías y a los transportistas. Según sus palabras, “la pesca es una cadena y, cuando falla algún eslabón, todo el sistema acaba resintiéndose”, remarca.

Fondos para el desguace y estudio de movilizaciones

Fondos para el desguace y estudio de movilizaciones

Las cofradías de pescadores, en una medida que comparte la Conselleria de Agricultura, Ganadería y Pesca, reclaman al Ministerio la habilitación de fondos para el desguace de parte de la flota. Según explicaron ayer el secretario provincial del sector, Juan Mulet, y el patrón mayor de Santa Pola, José López, esta sería la mejor salida para la lenta agonía por la que atraviesa al sector, dado que las embarcaciones que se mantuvieran contarían con una mayor viabilidad económica al poder repartirse los cupos que se dejen de utilizar. Los pescadores, asimismo, valoran la posibilidad de emprender movilizaciones para protestar por los sucesivos recortes.