El Parque Natural de El Hondo contará con dos nuevas fincas de 140 hectáreas para hacer un mayor seguimiento de la cerceta pardilla y reintroducir a esta especie en peligro extremo de extinción en el entorno natural. Para ello se invertirán 2,8 millones a lo largo de cinco años para ampliar el hábitat de esta especie acuática y contribuir a su reproducción. El proyecto, Life Cerceta Pardilla, se presentó este jueves e incluye al parque local así como a los humedales de Murcia y Andalucía donde también tiene presencia esta especie.

Los objetivos globales son aumentar a un mínimo de 125 parejas reproductoras en España, mitigar amenazas reforzando el hábitat o como mejorar las técnicas para hacer seguimiento de las aves. La inversión total casi alcanza los 6,4 millones. El programa parte del Ministerio de Transición Ecológica con fondos europeos y tiene nueve socios, entre ellos las tres administraciones autonómicas implicadas, la Confederación Hidrográfica del Segura, la fundación Biodiversidad así como dos organizaciones conservacionistas.

Los fondos que llegarán al Hondo son los más cuantiosos, teniendo en cuenta que se trata de uno de los humedales más importantes donde anidan más de 200 especies de aves distintas y es uno de los espacios más relevantes de Europa para la cerceta pardilla. La Conselleria de Medio Ambiente podrá adquirir las fincas particulares de La Raja (86 hectáreas) y la del Espigar (de 29 y 25 hectáreas), próximas al pantano de Poniente, para apoyar los programas de cría en cautividad y reintroducción del ave, ya que estos espacios están en puntos estratégicos al lindar con la zona de reserva y Carrizales.

Estos terrenos eran utilizados hasta la fecha como cotos de caza, por lo que quedarán blindados de la amenaza del hombre. Ambos espacios se unirán a la finca del Rincón, que ya es propiedad de la Generalitat Valenciana, para crear un entorno vital de reproducción de la cerceta pardilla, tal y como explicó la edil de Medio Ambiente, Esther Díez, durante la ponencia. Este proyecto LIFE se sumaría al trabajo desarrollado por la Conselleria desde 2017 para la recuperación y reintroducción de la cerceta, y que se amplió al Clot de Galvany desde 2020.

La consellera de Medio Ambiente Mireia Mollà señala que esta nueva implicación «dará mucha más forma y seguridad al trabajo que hace la Generalitat». Al hilo, apuntaba que uno de los principales retos es asegurar la cantidad y calidad de agua que llega a las charcas. Al respecto Asunción Ruiz como directora de SEO Bird Life, una de las socias del proyecto, recalca que «hacen falta una buena política del agua y agraria para atender al humedal». Hugo Morant como Secretario de Estado de Medio Ambiente sea señalaba en la presentación que había que abordar con ambición un proceso de rescate de los entornos naturales para proteger en este caso a la cerceta, «porque las especies sirven de termómetro para medir el nivel de calidad de esos espacios».