La Conselleria de Educación pretende que uno de cada dos jóvenes llegue a la Formación Profesional en 2030. En estos momentos el alumnado de FP sólo representa el 20% del total de enseñanzas, aunque las administraciones están potenciando a contrarreloj los múltiples ciclos para llegar a la mitad de la población.
A nivel autonómico están fijándose en modelos escandinavos como el Suecia y el de países europeos donde el FP tiene gran peso en la sociedad con tal de que en este plazo se convierta en una opción muy sólida como alternativa a los grados universitarios, y más ante la creciente demanda de técnicos.
De igual forma, esta semana la Dirección General de Formación Profesional ha autorizado para el próximo curso la implantación de proyectos de flexibilización de la oferta modular que permitirá una «FP a la carta», para que el usuario tenga cierta libertad a la hora de elegir las materias (módulos) que se ajusten a sus necesidades.
«Desarrollamos proyectos de innovación y el cambio metodológico va a un ritmo aceleradísimo» ELVIRA QUILES, DIRECTORA CIDA
Por el momento la provincia encabeza el número de grados, la mayoría medios y superiores, autorizados para implementar esta flexibilidad, 40 en total, seguidos de los 36 en la provincia de València y 10 en Castellón, que se inscribieron antes de acabar el plazo a finales de marzo.
De esta resolución también se destaca que la oferta de ciclos de doble titulación supondrá impartir un tercer curso según el proyecto autorizado al centro educativo.
«Hay muchos profesionales que llevan 40 años en una oficina, o en una fábrica y están desactualizados y se les puede acreditar las competencias, detectar qué les falta y que puedan matricularse en módulos donde no tienen competencia para crear su propio itinerario formativo con tal de mejorar en sus trabajos», señala Elvira Quiles, ilicitana al frente del Centro de Innovación Digital Avanzada (CIDA). Resalta, también, que con los últimos proyectos de innovación se está produciendo un cambio metodológico «a un ritmo aceleradísimo».
Es precisamente afinar al máximo en las metodologías, así como de hacer atractivas las asignaturas de lo que se encarga precisamente este organismo dependiente de Educación que se creó hace dos años.
«Hace falta cubrir puestos de refrigeración, edificación o calzado y la formación debe ser atractiva» CARMEN NAVARRO, SUBDIRECTORA GENERAL INNOVACIÓN FP
En el trabajan una quincena de profesores de Formación Profesional de toda la Comunidad Valenciana de diferentes ramas que continuamente se anticipan y testean qué puede funcionar en la FP. Para ello se fijan en los mejores ejemplos de éxito para aplicar a los ciclos de la provincia. Es así que uno de los cuatro programas que siguen se encarga de la internacionalización, para rastrear cómo trabajan otras comunidades autónomas e incluso otros países, así como para llevar a la práctica contenido con gancho y que tiene salidas, como en el campo de la robótica, la impresión 3D , la Inteligencia Artificial o las energías renovables.
Quiles resalta que además encuentran la garantía de que se están escuchando las necesidades de empresas sobre demandas de profesionales competentes en sectores de las 25 familias «para adecuar ritmos de la empresa a la formación».
José Muñoz, coordinador de la prospección de la FP en la provincia remarca que el impulso de la FP dual fue el primer gran paso de los que se esperan. Su equipo de encarga de asesorar en los centros y de hacer de nexo con las empresas «porque existe bastante necesidad de mano de obra en muchos sectores y tenemos que ir cogidos de la mano». Entiende el experto que la formación debe adecuarse «a lo que se necesita en el mercado laboral para conseguir el incremento de la empleabilidad». De igual forma, se ha negociado para que los alumnos tengan sueldos desde el primer curso a través de convenios de formación en empresas.
«La enseñanza debe adecuarse a lo que necesita el mercado laboral para aumentar la empleabilidad» JOSÉ MUÑOZ, COORDINADOR PROSPECCIÓN FP
Al hilo Carmen Navarro, subdirectora general de Innovación, Cultura Digital y Programas Europeos de la FP enumera que hay diferentes puestos de técnicos por cubrir en áreas como refrigeración, edificación o calzado, «entiendo que el trabajo de aparadora no ha sido atractivo pero a través de las acreditaciones con experiencia laboral pueden conseguir unidades de competencia».
Tal y como destacaba este diario hace unos días, la FP ha ganado desde 2015 más de 32.000 alumnos en la Comunidad Valenciana, pasando de 80.000 a 112.000 personas, lo que supone un incremento del 40%.
Para el próximo cursó se han ampliado en 5.700 el número de plazas (2.700 de ellas en la provincia, más que en València, con 2.400). Un tercio de los que tenían entre 20 y 29 años hasta hace relativamente poco tiempo no contaba más que con la educación obligatoria, sin formación laboral, y el 20% de los que tenían entre 18 y 24 no había superado la Secundaria.
Sin embargo, la creciente competencia obliga a formarse para lograr acceder a una profesión y la estampa que se vivió hace unos días con la primera feria de FP en Elche quizás hubiera sido inimaginable hace unos años porque no tantas personas se planteaban esa opción, aunque precisamente los docentes presentes en los stands lamentaban que se hubiese tardado tanto tiempo en ofrecer ese tipo de jornadas al aire libre para captar directamente a potenciales estudiantes y perder la anclada imagen de la FP es la «hermana pobre» de la educación.
Miguel Soler, director General de FP, abordó el pasado jueves que la creación de 20 consejos territoriales, uno por comarca también está facilitando el conocimiento sobre «qué queremos ser de mayores como comarcas, hacia dónde avanzar y en qué sectores».
Para el próximo curso escolar la provincia ofertará 86 títulos más de grado, 14 de básica, 27 de medio y 45 de superior, así como 13 nuevos cursos de especialización.
El 10% de los universitarios ya migra a los ciclos
La reconversión se produce por la alta demanda de técnicos en sectores como la construcción ecológica
Uno de cada diez universitarios termina migrando a la FP cuando termina sus estudios universitarios para encontrar rápidamente una salida laboral. Es la estimación que tienen desde la Dirección General de Innovación de la FP.
Según estudios de Eurostat, el 40,1% de las ofertas laborales exige la formación profesional de grado medio o superior, frente al 33,7% que exige titulación universitaria. Precisamente hace unos meses rectores de las universidades públicas de la provincia coincidían en aceptar de entrada, pero «con matices», que la empleabilidad de los estudiantes universitarios se incorporase como requisito de medida de calidad porque entendían que las salidas laborales dependían de cada carrera.
«El nicho de empleo esta en títulos superiores y hay una reconversión y es necesaria la innovación porque el tejido productivo de la Comunidad valenciana se acerca a la industria 4.0 de forma sostenible para tener empleabilidad», explica Carmen Navarro, subdirectora general de Innovación.
Indica la profesional que se está innovando en sectores tradicionales que terminaron de ser atractivos para los jóvenes hace mucho tiempo, como puede ser el campo de la construcción, que sufrió una debacle con la crisis del ladrillo en 2007.
Hace tres lustros era común que los adolescentes abandonasen los estudios para trabajar, por ejemplo, de peón en una obra. Como ese perfil se redujo a la mínima expresión ahora desde la FP están tratando de ofrecer ciclos donde se prepare a técnicos en construcción ecológica porque es lo que cada vez se demanda más.
