Poco antes de las 18:10 horas de este martes Día de Todos los Santos la Patrona de Elche era coronada reina en los cielos en lo alto de la basílica de Santa María.
La emoción, incluso las lagrimas de los protagonistas del drama asuncionista y del agradecido público, han inundado el templo. El trabajo bien hecho se confirmaba y los ilicitanos, con el corazón en un estado mejor que cuando entraron, agradecían con cuantiosos aplausos y vivas a la Virgen el esfuerzo para que una vez más el Misteri d'Elx sea algo inigualable, inaudito y que dice mucho del pueblo de Elche.
Desde antes de las 15 horas ya había gente guardando el sitio en la basílica de Santa María para poder disfrutar del Misteri desde los mejores lugares del templo.
Si bien por la mañana, en la primera parte, La Vespra, fácilmente se podían encontrar espacios para sentarse, durante la tarde, los que han llegado justos de tiempo no han tenido más remedio que permanecer de pie.
Sobre las 17.10 horas daba inicio la segunda parte de este Patrimonio de la Humanidad, La Festa, el momento más esperado por los vecinos de Elche que aman y veneran este drama asuncionista. Cientos de personas abarrotaban la basílica con el fin de estar al lado de la Patrona y vivir unos momentos muy especiales, con los sentimientos a flor de pie en algunos momentos.
En esta segunda parte los apóstoles empiezan los preparativos del santo entierro cuando los judíos les interrumpen e intentan hacerse con el cuerpo de la Maredéu.
En última instancia, tras la Judiada, la pelea en el Andador y el Cadafal, estos últimos se convertirán al cristianismo y posteriormente todos juntos marcharán para dar sepultura del tiempo.
Finalmente, María, en su asunción en el cielo es coronada como reina en una escena donde dos aparatos aéreos permanecen suspendidos uno sobre el otro.
El órgano, las cohetàs, los aplausos, los vítores, las loas a la Patrona y el oropel caído desde lo alto pintan en ese momento un fresco de incalculable valor, altamente emotivo al generarse una atmósfera muy especial que llega al corazón de todos.
Y es que no hay nada igual, nada comparable al Misteri.
