La construcción de un parking para el Mercado desata dudas y rechazo de los negocios de la plaza de las Flores

El parking subterráneo en la plaza de las Flores, que el alcalde Pablo Ruz ha prometido a los placeros para que regresen al Mercado Central, ha desatado preocupación y rechazo de los negocios que rodean el edificio de abastos.

Locales de hostelería, así como comercios y establecimientos de la zona han mostrado en una carta dirigida al primer edil la inquietud e incertidumbre por las repercusiones que tendrían en sus ventas las obras para construir el aparcamiento una vez que se finalice la rehabilitación del mercado.

En total, más de una veintena de negocios de la plaza de las Flores y de calles adyacentes han firmado un escrito para reclamar al regidor popular una reunión urgente con el fin de recibir información sobre este proyecto del que lamentan saber muy poco.

No son todos los que hay ahora mismo abiertos, algunos se han desmarcado, pero los que se han comenzado a movilizar sí que representan a la gran mayoría de una céntrica plaza que ha logrado revitalizarse en los últimos dos años gracias a la apertura de buena parte de los locales que bajaron la persiana por el conflicto ocasionado con el Mercado.

Muchos de ellos temen verse condenados al cierre al tener que soportar primero las molestias ocasionadas por la reforma del mercado (que apoyan y la consideran necesaria) y después tener que ver cómo regresan las máquinas a la plaza para construir un estacionamiento subterráneo. Vaticinan que el impacto en la facturación sería insostenible en el tiempo por los años de obras que supondría el plan del equipo de gobierno.

La solución de Ruz

La solución que el regidor popular anunció, nada más tomar las riendas del Ayuntamiento, para los negocios de la plaza de las Flores mientras duren las obras del aparcamiento es que puedan instalarse provisionalmente en el mercado, una vez rehabilitado, ya que los placeros han dicho que no saldrán de las instalaciones provisionales de la avenida de la Comunitat Valenciana hasta que no esté listo el parking.

Sin embargo, esta alternativa también genera dudas entre los negocios del entorno del mercado que firman la carta. A priori no les parece viable la opción de que puedan reubicarse en el edificio de abastos locales de distinta índole y con distintas necesidades y más sin saber qué pasará con el alquiler de sus locales.

La idea de Pablo Ruz para desbloquear el culebrón del Mercado, que dura más de una década, es iniciar el próximo verano la rehabilitación del antiguo edificio. Una vez finalice la obra, cuya duración la tiene que determinar el proyecto que se está redactando, el Ayuntamiento comenzaría con la construcción del aparcamiento de unas 140 plazas, al norte de la plaza de las Flores y con entrada y salida por la calle Ánimes.

El parking, que será estilo al del Gran Teatro, se construirá como ya dijo en campaña aprovechando el perímetro del parking de la Pescadería del que construyó en ese mismo punto el alcalde Ramón Pastor y que se soterró en el 99, para garantizar que no existen restos arqueológicos debajo. La idea de Ruz es que abra 24 horas siete días a la semana y que sea de rotación, con la posibilidad de que haya descuentos por comprar en el mercado.

De momento, PP y Vox han presentado ya el anteproyecto del Mercado sin poner fecha al parking por ahora y poniendo el foco en que una vez acabe la obra avanzarán en la siguiente fase.