El PSOE de Elda va a solicitar por escrito a la alcaldesa, la popular Adela Pedrosa, que retire todas las cámaras de vigilancia que enfocan directamente a su despacho municipal. En caso contrario no descartan emprender unas acciones legales que ahora están siendo objeto de estudio por los servicios jurídicos de su partido ante la posibilidad de que pudiera vulnerarse la legalidad.

Como ya se publicó a mediados de julio, cinco de las dieciséis cámaras de vigilancia que el PP ha instalado en el Ayuntamiento de Elda controlan los pasillos que dan acceso a los despachos de la oposición, tanto de Izquierda Unida como del PSOE. Por este motivo el portavoz del grupo municipal socialista, Carlos Ortuño, volvió a criticar ayer este "nuevo invento del PP y su coste, que es demasiado elevado, y que podría haberse empleado para cosas mucho más necesarias y provechosas". En su opinión "no está nada bien" que aquellas personas que acudan a un despacho de la oposición sean grabadas desde la calle hasta la segunda planta por al menos nueve cámaras diferentes. "Estoy convencido -indicaba ayer Ortuño en tono conciliador- que el equipo de gobierno no tiene intención de controlar a los que entran y salen de los despachos, pero creo que es mejor evitar tentaciones que atenten contra la privacidad de las personas porque hay una cámara en concreto desde la que se podrían seguir, incluso, las reuniones que hacemos dentro del propio grupo municipal y eso es muy fuerte". También el edil de IU, Josep David Martínez, se ha sumado a las críticas aludiendo al "agravio comparativo" que supone que en la zona de Alcaldía sólo haya una cámara que enfoca al ascensor y, sin embargo, en la zona de la oposición sean cinco orientadas directamente sobre sus despachos.

El concejal de Servicios Públicos, el popular Ricardo Monzó, ha restado gravedad al asunto. "El sistema de vigilancia no se va a poner en marcha hasta que dispongamos de todos los permisos y lo único que pretendemos es mejorar la seguridad del edificio, que ni siquiera tenía alarma y ya la hemos instalado", explicó ayer a este diario. Tampoco considera Monzó que los "18.000 euros" que ha costado todo el montaje sea un gasto excesivo. "Hay otros ayuntamientos de otros colores políticos que también tienen cámaras y no pasa nada", comentó mientras el edil de IU matizaba, al respecto, que el Ayuntamiento de Elda ya cuenta desde hace años con un Policía Local fijo para garantizar la seguridad.

Responder ante la Justicia

La ex alcaldesa de Xixona, la popular Rosa Verdú, tuvo que comparecer en la pasada legislatura ante la Justicia por instalar una cámara de seguridad en la sala de acceso a los despachos de la oposición sin contar con el permiso de la Subdelegación del Gobierno. Fue en mayo de 2006 cuando el PSOE interpuso una denuncia en el cuartel de la Guardia Civil al entender que la verdadera intención de la primer edil con la instalación de la cámara era "espiar a la oposición". Verdú tuvo que declarar ante un juez y dijo que su único propósito era, precisamente, garantizar la seguridad del Ayuntamiento. Con la llegada del PSOE al gobierno la denuncia se archivó porque la camara fue eliminada.