La tormenta con intensidad torrencial del jueves tuvo su principal foco en La Romana, Hondón de las Nieves y Algueña y, según las valoraciones realizadas por los técnicos de Asaja, 9 millones de kilos de uva de mesa de la variedad Aledo han sufrido daños y, de ese montante total, al menos dos millones de kilos se han perdido íntegramente en los parajes de Pomares y Boquera de La Romana. También las viñas de vinificación y las fincas de almendros han perdido buena parte de su cosecha por un granizo que llegó a alcanzar los 30 milímetros.
Para comprobar los devastadores efectos del «reventón húmedo» y mostrar su apoyo a los afectados, Lázaro Azorín y Yolanda Seva, diputados en la comisión de Agricultura del Congreso, han visitado los campos de La Romana junto al alcalde Nelson Romero y el concejal del área. Tras contactar con Toni Quintana, director general de Agricultura, Azorín anunció que realizarán un seguimiento de las gestiones del Ministerio y de la conselleria sobre las peticiones de ayudas directas o reducciones de módulos al campo por inclemencias meteorológicas. «Este año se han destinado 30 millones de euros a tal fin pero ahora necesitamos que los seguros hagan los informes pertinentes para iniciar el procedimiento», puntualizó el diputado socialista.
El alcalde de La Romana, Nelson Romero, aprovechó la presencia de los dos representantes del Gobierno para solicitarles su máxima implicación en la concesión de unas «ayudas que son vitales para los productores y los empresarios agrícolas, que han perdido todo un año de trabajo, sacrificio e inversiones por una demoledora tormenta de media hora». Pero Romero también reclama ayudas para los temporeros del sector. Concretamente para los jornaleros que en una semana iban a comenzar a trabajar en la campaña del embolsado de la uva de mesa y para las almacenistas que se encargan de limpiar, seleccionar y envasar la fruta una vez recolectada. El alcalde calcula que, como consecuencia de los daños del pedrisco, el 20% no tendrá trabajo esta temporada. Por eso también solicita ayudas para ellos a través del SEPE o de cualquier otra entidad pública. «Durante los momentos más duros de la pandemia los agricultores estuvieron al pie del cañón para que no nos faltara comida en las mesas sin recibir subvenciones como sí han tenido el turismo, el ocio y la hostelería. Pues bien, creo que ante el desastre que han sufrido es hora de devolverle todo lo que han hecho por nosotros», subraya Nelson Romero.
