Hércules 2-0 Alzira

El Hércules sale del atasco

Dos goles en la segunda parte, uno de Aketxe y otro de Acuña, permiten a los de Mora ganar en Liga un mes después y terminar con la sequía de sus delanteros. Las asistencias de Pedro Sánchez resuelven un partido difícil pese a jugar en superioridad más de una hora

Javier 'Toro' Acuña celebra el segundo tanto del Hércules al Alzira después de su remate en plancha.

Javier 'Toro' Acuña celebra el segundo tanto del Hércules al Alzira después de su remate en plancha. / Jose Navarro

Pedro Rojas

Pedro Rojas

Las sensaciones explican el fútbol y la vida de cualquiera. Una punción, un corte, un escalofrío o un sofocón definen la realidad mejor que cualquier libro o manual de instrucciones. Por eso, cuando ves a alguien como Acuña retorcerse de dolor entiendes rápido que algo no va bien. Volvió a ocurrir. Raúl Ruiz le filtró un balón maravilloso al espacio y el Toro lo convirtió en un mano a mano solo acomodando el cuerpo y enfilando el área. Miró al portero y, cuando iba armar la pierna, Kaiser se lo llevó por delante.

Su gesto crispado, la entrada apresurada de los «fisios», las maniobras con la rótula para calibrar la gravedad de la contusión, las cuatro letras que gritó rabioso mientras abandonaba con ayuda el campo, cojeando, todo eso se amontonó en la cabeza de la gente, que se olvidó de que habían expulsado al autor de la falta y se centró en la urgencia infinita de la cura.

Revivir los traumas es descorazonador, alienante. El tiempo se vuelve viscoso, lo mismo que el aire, así que cuando por fin cambia el sino, la felicidad te vuelve invulnerable. El Toro regresó al partido después de seis eternos minutos probándose. Cuando entró, siguió dudando, pero sin renunciar al choque porque eso lo lleva en la sangre. El paraguayo venció al desastre inducido, cambió su suerte y con ella, la del Hércules.

BAJÓN EN LA ASISTENCIA: Menos de 4.000 espectadores en la grada 

La cifra oficial de asistencia de público al estadio ayer fue de 3.879 espectadores, un registro que dista mucho del alcanzado en la visita del Intercity al Rico Pérez hace 15 días. Aunque para aquel envite el club promovió la presencia de herculanos en la grada con una promoción para sus socios, lo cierto es que ayer, tras el desengaño en el derbi, la grada perdió a más de 5.000 pobladores.

Sergio Mora recuperó la estructura que hizo renacer el proyecto durante el paso del Murcia por el Rico Pérez. Dejó a Borja Díaz en el banquillo y reunió a Bikoro con César Moreno y Pedro Sánchez. Mientras el Alzira mantuvo el orden con todos sus efectivos, la producción ofensiva blanquiazul resultó escasa. El Hércules tenía el dominio posicional, pero no el control de la pelota, que es algo que le está pasando muy a menudo en sus últimas puestas en escena, dentro y fuera.

Tras la expulsión antes de la media hora, el panorama mejoró algo, pero la cercanía al gol continuó diluida entre balones perdidos, malos controles y desplazamientos en largo fallidos de los laterales y de los mediocentros. Eso obligó a Pedro Sánchez a intentar asumir el peso de las salidas desde atrás, una tarea que le honra, pero que le empeora como futbolista porque lo suyo no es concebir el ataque estático, sus iniciativas son más eficaces en campo contrario. 

La expulsión de Kaiser en el minuto 26 por una entrada muy dura al paraguayo condicionó el encuentro

Mora recibió al equipo al descanso con una sola idea en la cabeza: templar los nervios. Jugar con uno más solo es realmente fácil cuando marcas. Si no lo haces, te come la ansiedad que genera el paso de los minutos sin horadar la portería de tu contrincante.

Ideó una solución, una controvertida, una de esas cargadas de veneno que te fortalecen como entrenador cuando salen bien, pero que si fallan... Retiró a Galán, le dejó toda la banda a Álex y puso a Aketxe cerca de Acuña, aunque no pegado a él. Su homólogo, Dani Ponz, que no tocó nada cuando su central vio la cartulina roja, prefirió introducir su variación tras la reanudación para robarle tiempo de actividad al cronómetro.

Recurrió a las dos líneas paralelas cerca de su portero, una de cinco y otra de cuatro. Solo Adrián se quedaba en el campo del Hércules mientras los blanquiazules atacaban. Consecuencia: poco espacio para que Bikoro y Pedro trazaran pases y nutrieran a los dos delanteros a pesar de los esfuerzos del Toro por abrir huecos cayendo a los costados pese al daño en la rodilla.

EL DATO: Un gol encajado en las últimas seis jornadas de Liga.

►El Hércules solo ha recibido un gol en este último tramo de la temporada. Desde el 12 de diciembre, el equipo de Mora ha mantenido su portería a cero cinco veces en las últimas seis jornadas. El único que ha logrado marcarle ha sido el Intercity.

LO MEJOR: La reinterpretación del juego del Hércules en la segunda parte.

►Tras el descanso, y con uno más, Mora retiró del campo a Galán para dar entrada a Aketxe. Funcionó porque, desde su entrada, Pedro Sánchez y Bikoro dispusieron de más libertad para iniciar las acciones de ataque.

LO PEOR: El susto que dio Acuña en el minuto 26 tras recibir una dura falta  

►La entrada de Kaiser cuando el paraguayo se iba solo al mano a mano con el portero, dejó al delantero del Hércules al borde de la sustitución por un golpe fuerte en la rodilla derecha. Por suerte, fue capaz de reponerse.

Sustituir a un extremo cuando la teoría demanda desborde para generar desequilibrio y suplirlo por un ariete puro es una maniobra que hay que tener muy clara. El técnico madrileño cambió el modo de atacar. Con los dos «nueves» incordiando en diferentes zonas de la línea defensiva y con los hombres de banda profundizando, el Alzira se concentró en las referencias directas y dejó más libres a los secundarios.

El colegiado expulsa al central del Alzira Kaiser después de su entrada a Javier Acuña.

El colegiado expulsa al central del Alzira Kaiser después de su entrada a Javier Acuña. / Jose Navarro

Pedro y Bikoro empezaron a aparecer. El de Aspe se inventó una asistencia prodigiosa para Aketxe que no acabó en gol porque el vasco se metió en fuera de juego por escasos milímetros. No salió, pero fue el primer aviso. En la única visita al campo del Hércules, con la hora de juego ya sobrepasada, el equipo valenciano dispuso de un saque de banda. Lo ejecutó muy mal. Pedro Sánchez recogió esa bola casi en la frontal y montó la contra. Condujo con velocidad, sin perder de vista el cuero. Cruzó la medular, siguió corriendo, los dos delanteros se le abrieron para facilitarle la llegada, miró a Acuña y se decantó por Aketxe que, sin frenar la circulación, con un leve toque con el exterior de la bota derecha, recortó hacia fuera, dribló a su marcador y, desde el límite del área, por fuera, dibujó un golpeo que se fue alejando del portero en busca de la red. Marcó, más de dos meses después, su séptimo tanto y acabó con la resistencia alzireña.

Bikoro, titular de nuevo tras su regreso de África hace una semana, intenta el disparo a puerta.

Bikoro, titular de nuevo tras su regreso de África hace una semana, intenta el disparo a puerta. / Jose Navarro

El Hércules había hecho lo más complicado, pero faltaba lo mejor, las lágrimas de felicidad de Acuña. Menos de seis minutos después del abrazo coral al delantero vasco, Pedro Sánchez y Álex Martínez negociaban cómo sacar un córner. El lateral pasó por encima del balón y el talento aspense hizo lo demás. Centro tenso al punto de penalti después de dos maniobras de arrastre. En el espacio libre, como hizo en el Pepico Amat en la primera vuelta, se lanzó en plancha el Toro, esta vez unos centímetros más arriba que durante su vuelo en Elda, y el paraguayo, con un cabezazo seco, dictó sentencia a veinte minutos del final. Su sollozo incontenible, emocionado, fue el de todo el estadio. La felicidad es maravillosa cuando se comparte.

LA FICHA

►HÉRCULES: Adrián López; José Fernández, Diego Jiménez, Tano, Álex Martínez; César Moreno, Bikoro (Raúl González, 86’); Raúl (Nico, 78’), Pedro (Elliot, 86’), Borja Galán (Aketxe, 46’); y Acuña (Borja Díaz, 78’).

►ALZIRA: Pawel; Estacio, Kaiser, Soler (D. López 76’), Juanma (C. Pérez, 76); Selfa, Lado; Belizón, Marenya (Lapeña, 76’), Francis (Bono 50’); y Chema Moreno (Coscia 76’).

GOLES:  1-0, Min. 65: Isaac Aketxe.  2-0, Min. 71: Javier Acuña. 

ÁRBITRO: José Mª Aranda Delgado (andaluz). T. amarillas: para Bikoro (4’), Aketxe (68’) y Tano (70’), del Hércules, y para Soler (17’) y Chema Moreno (70’), del Alzira.  T. Roja: para Kaiser (26’), del Alzira. INCIDENCIAS: Partido correspondiente a la jornada 21 en el grupo 5 de Segunda RFEF disputado ayer en el José Rico Pérez de Alicante con 3.879 espectadores en la grada y representación de la afición alzireña en el estadio blanquiazul. 

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