Los calamares son un plato delicioso y muy versátil que se puede cocinar de manera muy sencilla y que a los niños les encanta. Una forma rápida y fácil de cocinar calamares congelados es en una freidora de aire. En esta receta, te enseñaremos cómo preparar calamares crujientes y deliciosos congelados en una air fryer y en menos de diez minutos. El resultado te sorprenderá y los niños comerán pescado sin rechistar.

Calamares congelados en freidora de aire

Para preparar un plato de calamares en freidora de aire solo necesitarás una bolsa de calamares congelados y un limón. Si quieres también puedes utilizar un poco de aceite de oliva en spray, aunque esto es opcional. Si los cocinas sin nada de aceite la receta resultará aún mucho más saludable y digestiva. La preparación no puede ser más sencilla.

Coloca un trozo de papel para hornear en el fondo de la cesta de la air fryer y pon sobre él los calamares congelados con cuidado de que no se toquen. De esta forma todos se cocinarán correctamente.

Freidora de aire. Enjoy The Life

A continuación programa la freidora de aire caliente durante 9 minutos con una temperatura de 180 grados y deja que se cocinen. Si quieres que queden más crujientes aún añade uno o dos minutos al tiempo de cocinado. Pasado este tiempo ya estarán listos para servir. Puedes añadirle unas gotitas de zumo de limón si te gusta o acompañarlos con un poco de mayonesa.

Consejos para que los calamares queden más crujientes en la Air Fryer

No es necesario que des la vuelta a las anillas de calamar rebozadas mientras se están cocinando en la Air Fryer. Sin embargo, si quieres un resultado aún más crujiente puedes darle la vuelta cuando haya pasado la mitad del tiempo de cocción ( es decir, a los 5 minutos).

Otro truco para esta receta que debes tener en cuenta es que no es necesario precalentar la freidora antes de meter los calamares rebozados. De esta forma ahorrarás energía.

Te puede interesar:

La freidora de aire tienes múltiples ventajas MZZ001/Shutterstock

Recuerda que tanto el uso del aceite de oliva como del zumo de limón es opción. En el caso de que optes por ponerle unas gotitas de zumo de limón debes hacerlo cuando los calamares ya estén servidos en el plato y no antes, ya que se reblandecerían. Lo ideal es que los sirvas sin aliño y acompañes el plato con medio limón para que cada uno de los comensales se ponga o no en función de sus gustos.