Llevábamos mucho tiempo escuchando hablar de este restaurante, pero por unas cosas u otras nunca habíamos ido hasta hace poco. Reservamos con antelación por la web y ahí nos presentamos un jueves a las 21.30h.

Es un restaurante bien decorado con varias zonas: un salón interior, una pérgola cubierta y una terraza. Nosotros elegimos la pérgola. Aunque ya había gente en el restaurante, nos atendieron y sirvieron bastante rápido. Éramos 4 y para beber elegimos empezar con Caraballas, un Verdejo D.O. Castilla y León, aunque luego nos pasamos al tinto con un Hacienda Solano de Ribera del Duero.

Todo a la brasa

En cuanto a la comida, decidimos compartir varios platos al centro. Así que empezamos pidiendo unos buñuelos de Idiazabal por recomendación del camarero que nos dijo que eran todo un hit. Y lo cierto es que no nos extraña, son toda una bomba de queso idiazabal. Algo que va más allá de la típica croqueta. También pedimos unos cogollos braseados con salsa de romescu, tomate semiseco y vinagreta de nueces, el aguacate a la brasa con tomate, cebolla crujiente y emulsión de cilantro y los puerros al carbón con sus chips y pesto rojo.

Pulpo a la brasa. INFORMACIÓN

Sabíamos que la especialidad de Mordida eran las brasas, de hecho casi todos los platos de la carta están hechos al josper (que para quien no lo sepa es un horno de carbón que alcanza temperaturas de más de 350º).

Pero lo que no nos esperábamos era que se pudiesen cocinar este tipo de verduras y hortalizas de esta forma. Desde aquí te aseguramos que pocas veces vas a probar unos cogollos, un aguacate o unos puerros tan diferentes y con este sabor.

Puerros al carbón con sus chips y pesto rojo. INFORMACIÓN

Para los segundos optamos por el pulpo a la brasa, el steak tartar con helado de mostaza y el entrecot madurado selección de La Finca, también todo al centro. Nos encontramos con un pulpo tierno con un buen sabor a brasa, una buena ración de steak tartar, muy divertido e interesante y con ese toque diferente que le da el helado de mostaza y un solomillo madurado, perfectamente ejecutado y donde el josper saca todo su potencial. Simplemente espectacular.

Una experiencia gastronómica insuperable. INFORMACIÓN

Y de postre: ¡Torrija especiada con helado de turrón!

Terminamos con una torrija especiada con helado de turrón, también para compartir. Lo cierto es que no podíamos más, pero no pudimos evitar pecar. Y no hicimos nada mal, porque ¡bendita torrija!

Nos quedaron varios platos por probar de los que nos han hablado muy bien como las flor de alcachofa , la ensaladilla y por supuesto el chuletón madurado. Así que sin duda, hay que volver a por más a Mordida.

Pagamos 30€ por persona. 40€ Incluyendo el vino.

Puedes saber más sobre mordida en su página web o visitarlos en Ctra. Benimagrell, 12, El Campello