El Teleadicto

2046

Antonio Sempere

Antonio Sempere

Además de ser el título de la prodigiosa película de Wong Kar-Wai, el año 2046 también podría ser el del final de la emisión del espacio Encuentros si del mismo se grabasen las 400 entregas, redondeando, que Joaquín Soler Serrano llevó a cabo de A fondo.

Todos estaremos de acuerdo en que un espacio como el mencionado es más que necesario en una televisión pública. Produciendo a un ritmo de dieciséis entregas anuales, a partir de este año que acaba en el que después de muchos avatares por fin cristalizó el ansiado proyecto, allá por 2046 los archivos de TVE podrían contar con otras 400 entregas de Encuentros. Una versión renovada de A fondo, grabada en Alta Definición y una realización magnífica.

Por falta de invitados no será. Existen tantos y tan variados que, por desgracia, se quedan sin su entrevista atemporal extensa, que ese no es el problema. Pongo un pequeño ejemplo. Desde que Días de cine dejó de ser presentado por Elena S. Sánchez y su director Gerardo Sánchez decidió que cada entrega fuese conducida por un padrino o madrina, han pasado por el programa 160 figuras relacionadas con el cine. Todas ellas merecerían una larga entrevista, documentada y bien realizada, en Encuentros. Añádanse figuras de las artes escénicas, artes plásticas, literatura, ciencia, fotografía y otros campos. El filón es inagotable y el formato modélico.

Lo anómalo es que en una televisión pública no exista una ventana como Encuentros (que han conducido con maestría Jesús Marchamalo y Elena Sánchez Caballero) de forma permanente. O que se programe a hurtadillas porque su emisión baja la audiencia. Eso sí serían cuestiones que merecerían la reflexión de los consejeros de RTVE y los analistas televisivos. Encuentros ha acabado su primera temporada. No debería morir.