Admiración por quienes abren negocios

Vicente Magro

Vicente Magro

Si hay algo que agradecer hoy en día es a aquellas personas que apuestan su dinero, y el que no tienen en virtud de préstamos personales, para abrir un negocio y contratar personal sacándolos del paro para seguir con la reactivación económica y que el país no se pare, sino que siga adelante gracias a estas personas que ponen todo su empeño y se arriesgan personalmente para abrir negocios de todo tipo.

De esta manera, tanto estos pequeños empresarios como aquellos que ya tienen una sólida implantación en el mundo empresarial, son pieza básica y esencial en el funcionamiento del país. Son estas personas individuales y empresas las que siguen apostando por renovarse por incrementar las tecnologías en su empresa, por seguir contratando al personal que necesitan y por mantenerse en ser competitivos dentro y fuera de nuestro país. Así, este empuje e iniciativa producen en todos nosotros una alta admiración en la sociedad por su empuje personal y colectivo para que la creación de puestos de trabajo sea una constante y que muchas familias tengan un soporte económico para vivir gracias a estos emprendedores personales y a las empresas que hacen lo posible para mejorar cada día más.

Pero muchas veces, la inmensa mayoría, estas apuestas personales no se ven recompensadas con ayudas que serían necesarias para promocionar y promover que más personas adopten estas iniciativas, y que en lugar de ver que se cierran locales y negocios comprobar que esos pequeños locales se van convirtiendo en actividades comerciales que van iluminando nuestras calles y dando alegría al desarrollo profesional, cuando vemos nuevos negocios que se abren y más empleados que son contratados por estos pequeños emprendedores y también por medianas empresas.

Pasar por una calle donde se ven muchos locales cerrados, o sin haberse realizado ningún tipo de obra para abrir un negocio, causa honda preocupación y desmoralización. Pero, sin embargo, cuando vemos locales donde se están haciendo obras y que se abren nuevos negocios en una zona, da mucha más alegría a la misma y permite respirar optimismo cuando se percibe que hay personas que siguen apostando por abrir negocios, crear empleo y dar puestos de trabajo a quien no lo tiene. Y ello, porque pocas cosas pueden dar más satisfacción a cualquier persona, gente joven, o de mediana edad, que le llamen para decirles que han aceptado su currículum y que su propuesta para trabajar ha sido aceptada, y que han encontrado un puesto de trabajo. Porque pocas cosas pueden producir más alegría que le notifiquen a un ciudadano que está en el paro que va a empezar a trabajar en una actividad, sobre todo, gracias a esta decisión de emprendedores que arriesgan su dinero para dar servicio y puestos de trabajo en la sociedad actual.

Tenemos un altísimo nivel de emprendedores en nuestro país, y gente muy válida que desarrolla sus ideas, sobre todo en cuestiones relacionadas con inteligencia artificial y nuevas tecnologías, donde en el reciente congreso que hubo en Alicante se pudo comprobar el alto nivel de las personas que participaron y la capacidad de atracción de sus organizadores para concentrar en Alicante un evento de estas características, porque lo relacionado con la inteligencia artificial tiene un alto campo de implementación para la creación de negocios y oferta de nuevos servicios.

En un reciente informe de la CEOE se recoge que el perfil del emprendedor en España es el de persona joven, con una edad media entre los 25 y los 34 años, y con experiencia previa en haber participado alguna vez en la creación de una startup (58%). Respecto al nivel de formación, una amplia mayoría cuenta con algún grado universitario (98%) o máster (78%), principalmente en especialidades técnicas o carreras STEM (áreas de ciencias, tecnología, ingeniería o matemáticas). Además, se observa un aumento de los emprendedores que tienen un doctorado. Los sectores más frecuentes del emprendimiento se centran en áreas como la salud, la agricultura y la industria manufacturera, los servicios digitales, la energía, la educación, el transporte y la conectividad. Se añade que, entre las principales razones para iniciar su aventura empresarial, los emprendedores españoles destacan una combinación entre motivación y detección de oportunidades de mercado que encajan en su concepto de empresa. En menor medida, justifican su elección emprendedora por interés en un proyecto determinado o como recurso para cambiar de vida profesional. Pero, sea como fuere, un diez para estas personas que son las que dan vida a un país y esperanzas en que tengamos cada vez más emprendedores y que se les ayude para que puedan serlo también.