Exquisita educación

Varios usuarios toman la línea 14 del autobús en Alicante

Varios usuarios toman la línea 14 del autobús en Alicante / Héctor Fuentes

Francisco Javier Sotés Gil

Cuando veo a alguna persona con bastón,pienso en el dolor que debe tener y que se apoya para poder andar. De hecho se observa,sobre todo en mujeres,que siempre ceden el asiento o ayudan con su esfuerzo a la persona que lleva bastón, y he podido observar que cada cinco mujeres hay un hombre que cede el asiento.La educación se demuestra viendo como ceden el paso a la persona que cojea y que hay otros que corren para no perder su paso si dejasen ir delante a la persona del bastón.

Hay personas que con exquisita educación ceden el paso e incluso esperan que pase la persona del bastón. He visto a algún conductor de autobús que se levanta de su asiento para ayudar a bajar del mismo a la persona que ha solicitado parada. Siempre hay personas buenas,amables y educadas,que sienten por la persona del bastón cierta conmiseración para ayudarle. A veces los asientos reservados lo ocupan jovenes sanos, y es chocante que se levante la persona mayor que ocupa uno de los dos asientos, y no el joven que nunca debería estar sentado allí. Las advertencias que aparecen en el televisor anunciador del autobús dice que se respeten los asientos reservados y que se ceda el paso al subir al autobus a las personas que van con bastón.