Toni Pérez falta a cuatro de las últimas cinco juntas de gobierno de la Diputación

·El presidente de la institución provincial no ha asistido a la mayoría de reuniones en noviembre ni a la primera de diciembre, y su equipo se escuda en que coincidieron con actos

·La oposición critica las ausencias y acusa al también alcalde de Benidorm de paralizar la actividad

Toni Pérez y Loreto Serrano conversan con la secretaria de la Diputación, Amparo Koninckx

Toni Pérez y Loreto Serrano conversan con la secretaria de la Diputación, Amparo Koninckx / Pilar Cortés

Borja Campoy

Borja Campoy

Desde el pasado 8 de noviembre, el presidente de la Diputación de Alicante, el popular Toni Pérez, solo ha asistido a una de las cinco juntas de gobierno que ha celebrado el equipo de gobierno de la institución provincial, lo que acarrea las críticas de la oposición, principalmente de los grupos del PSPV-PSOE y Compromís, que señalan que las ausencias del presidente provocan una paralización en el funcionamiento del día a día del Palacio Provincial. Los grupos de izquierda aseguran que el presidente no delega las decisiones en sus diputados, por lo que sus ausencias suponen un serio contratiempo en la capacidad de decisión que se tiene en la Diputación.

De las últimas cinco reuniones del equipo que dirige la Diputación de Alicante, el presidente, Toni Pérez, solo ha acudido a uno de los encuentros. Esta cita fue la que se celebró el pasado 20 de noviembre. En el resto de las reuniones, las de los días 8, 13 y 27 de noviembre y 4 de diciembre, el también alcalde de Benidorm no pudo acudir a las reuniones que celebra el equipo de gobierno de la Diputación. En las actas de todos esos encuentros se señala que su ausencia se debe a motivos justificados.

Sustitución

En ausencia del presidente de la institución provincial, su liderazgo en esos encuentros ha sido reemplazado por las dos vicepresidentas del equipo de gobierno con el que cuenta el PP en la institución provincial. En las reuniones de los días 8 y 27 de noviembre la representación de Toni Pérez fue asumida por la vicepresidenta primera, Ana Serna, mientras que en las que tuvieron lugar el 13 de noviembre y el 4 de diciembre fue la vicepresidenta segunda, Marina Sáez, quien dirigió la sesión.

Estas ausencias de Toni Pérez en las juntas del equipo de gobierno de la Diputación de Alicante han provocado las críticas del PSPV y Compromís desde la oposición, y sostienen que su cargo como presidente de la institución provincial tiene dificultades de compaginación con otros dos de los que ocupa: el de alcalde de Benidorm y el de presidente provincial del Partido Popular. La oposición también señala que el resto de los diputados del grupo popular apenas tienen margen de actuación si no reciben el visto bueno del propio Toni Pérez. 

Las acusaciones de la oposición sobre la falta de asistencia del presidente de la institución provincial a las juntas de gobierno no se detienen aquí. La «paralización» del funcionamiento del día a día de la Diputación que achacan a su comportamiento también se extiende a otros campos de actuación, como es el de la configuración de los presupuestos de la institución provincial de cara al próximo año 2024. En este sentido, por ejemplo, desde el PSPV, se señala que se le ha pedido a Toni Pérez hasta tres veces que convoque una reunión formal con el grupo socialista para abordar las cuentas del próximo año. Dos de estas peticiones se han realizado por escrito, mientras que la tercera tuvo lugar en el último pleno ordinario, el que se celebró a principios del pasado mes de noviembre. Al margen de estas tres peticiones, desde el grupo socialista aseguran que son «numerosas» las veces que se ha solicitado una reunión de manera verbal, con carácter informal.

Respuesta

Ante estas acusaciones, desde el equipo de gobierno de la Diputación se señala que «las juntas de gobierno se convocan siempre intentando la mejor coordinación con las agendas de los diputados, que a su vez son ediles y alcaldes en distintos municipios». Con este argumento, desde el equipo de gobierno se añade que «el objetivo del equipo de gobierno de la Diputación es trabajar y defender los intereses de todos los municipios de la provincia», ya que sostienen que «los entre 1.650 y 1.700 concejales alicantinos son los que mejor conocen las necesidades de sus municipios».

En paralelo, desde el mismo equipo de gobierno justifican algunas de las ausencias del presidente Toni Pérez en las juntas, como la que tuvo lugar el pasado 6 de noviembre, por la coincidencia con la feria de turismo World Travel Market, celebrada en Londres, o la más reciente del 4 de diciembre por el primer corte de la alcachofa en Daya Vieja.

La izquierda aprieta con la ejecución presupuestaria

La ejecución de la Diputación de Alicante se encuentra estancada. Al igual que ocurrió el año pasado, al cierre del tercer trimestre de este 2023 solo se ha ejecutado uno de cada tres euros previstos. La institución provincial ha gastado al cierre del tercer trimestre 204 millones de euros de los 611 que estaban previstos para el total del ejercicio. El dato es todavía más llamativo cuando se hace referencia a los dos capítulos de inversiones, el 6 y el 7, en los que se han ejecutado 38 de los 273 millones que estaban fijados, lo que representan un 14 % del total.

Esta situación, que se viene arrastrando en los últimos tiempos, hasta el punto de que Intervención señaló el pasado año que los números representaban «el peor registro del decenio», han provocado que la oposición levante la voz de alarma. Al respecto, se han pronunciado tanto el portavoz del grupo socialista, Vicente Arques, como del grupo de Compromís, Ximo Perles. El socialista ha alertado del riesgo que supone que la «baja ejecución» provoque la pérdida de algunos de los proyectos que actualmente están en marcha, debido a factores como la subida del coste de los materiales de las obras o el encarecimiento de la energía.

En este sentido, el portavoz socialista, que, a su vez, es el alcalde de l’Alfàs del Pi, viene poniendo el acento en que los municipios necesitan actualmente ayudas para paliar la subida de los precios de la energía, mientras que desde la Diputación aún se están poniendo en marcha subvenciones que están vinculadas con la pandemia, lo que Arques considera que está superado «tanto en el día a día como a nivel administrativo». En este sentido, el portavoz socialista también denuncia que en el presupuesto de la Diputación existen partidas que, en un primer momento, no figuran y que, posteriormente, son «infladas» a través de los remanentes de tesorería.

En último lugar, Arques hace alusión al Fondo de Cooperación. En la línea que viene defendiendo el PSPV a lo largo de los últimos años, el portavoz socialista sostiene que la negativa de la Diputación a sumarse al plan inversor que impulsó el Botànic en su momento ha supuesto que los ayuntamientos de la provincia de Alicante hayan dejado de recibir cien millones de euros a lo largo de los últimos años. Por su parte, desde el Consell, que ahora encabeza el popular Carlos Mazón, se sostiene que se está trabajando en un nuevo plan que pondrá el acento en los municipios de menor población. 

En la misma línea que Arques se pronuncia el portavoz de Compromís, Ximo Perles. «Llevamos tiempo avisando de la nefasta gestión y el bajo grado de ejecución. El PP no tiene un proyecto para la Diputación y los ayuntamientos están sufriendo algo que no habían vivido», afirma Perles.