Cómo limpiar la cera de los oídos y qué no debes hacer jamás

La cera de los oídos, también conocida como cerumen, es una sustancia natural producida por las glándulas ceruminosas en el canal auditivo.

Su función es proteger el oído de la suciedad, el polvo y las bacterias. Sin embargo, a veces puede acumularse en exceso y causar molestias, como la pérdida temporal de la audición o el malestar. En estos casos, es importante saber cómo quitar la cera de los oídos de forma segura y efectiva.

1. No uses hisopos de algodón: Aunque puede ser tentador utilizar un hisopo de algodón para limpiar los oídos, esto puede empujar la cera más profundamente en el canal auditivo y causar daño. En lugar de eso, utiliza métodos más seguros como algunos de los que te presentamos a continuación y recuerda: Evita objetos extraños: Nunca introduzcas objetos extraños en el oído para tratar de eliminar la cera por ti mismo. Esto puede causar lesiones graves en el canal auditivo y el tímpano.

Cómo limpiar el cerumen de forma segura

1. Lava tus oídos: La forma más sencilla de mantener los oídos limpios es lavarlos con agua tibia mientras te duchas. Deja que el agua fluya suavemente sobre los oídos y se lleve la cera acumulada. No uses agua demasiado caliente, ya que podría dañar tus oídos.
2. Aceite mineral: Si sientes que la cera está muy compactada o endurecida, puedes utilizar unas gotas de aceite mineral para ablandarla. Coloca algunas gotas en el oído afectado y deja que actúe durante unos minutos. Luego, inclina la cabeza hacia el lado para que el exceso de aceite y cera salga. Puedes limpiar suavemente el oído externo con una toalla suave.
3. Solución de agua y peróxido de hidrógeno: Mezcla partes iguales de agua tibia y peróxido de hidrógeno (3%) y coloca unas gotas en el oído afectado. Esto ayudará a ablandar la cera y a liberarla. Nuevamente, inclina la cabeza para permitir que la solución y la cera salgan del oído.
4. Limpieza profesional: Si la acumulación de cera es grave o si tienes antecedentes de problemas en los oídos, es recomendable consultar a un profesional de la salud, como un otorrinolaringólogo. Ellos pueden realizar una limpieza segura y efectiva utilizando instrumentos especiales.
5. No utilices gotas de limpieza de oídos en exceso: Las gotas comerciales de limpieza de oídos pueden ser útiles, pero deben usarse con moderación y según las indicaciones del envase. No excedas la cantidad recomendada y, si no obtienes resultados, busca atención médica.

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En resumen, la acumulación de cera en los oídos es un problema común y depende de la persona (si produce más o menos cerumen), pero se puede abordar de manera segura y efectiva siguiendo estos consejos. Siempre es importante ser cauteloso y no intentar eliminar la cera de manera agresiva por uno mismo, ya que esto puede causar daño. Si tienes dudas o experimentas dolor, pérdida de audición persistente u otros síntomas inusuales, consulta a un profesional de la salud para una evaluación adecuada y un tratamiento adecuado.