Estaba en muerte cerebral tras intentar extraerse un pelo encarnado en la ingle: "Los médicos no tienen la última palabra"

El dramático giro en la vida de Steven Spinale comenzó con un gesto tan común como intentar quitarse un pelo encarnado en su zona inguinal, lo que derivó en una grave infección y lo ha llevado al borde de la muerte. Diagnosticado con sepsis, una respuesta letal del organismo ante una infección, Spinale vio cómo su vida pendía de un hilo al finalizar el año 2022, sumido en un coma inducido médicamente y sometido a una cirugía a corazón abierto.

La sepsis, causada por una reacción desmesurada del sistema inmunitario que comienza a atacar los tejidos y órganos del propio cuerpo, se desarrolló después de que el intento de Spinale por extraer un pelo encarnado en su pierna terminara en una infección. A pesar de sentirse gravemente enfermo un mes antes de su ingreso hospitalario, varios centros de salud descartaron su caso, sugiriendo que podría estar exagerando su condición, según relató su hermana Michelle en un video de TikTok.

Comenzó a vomitar sangre pero fue enviado a casa

La situación, cuenta The Sun, se agravó cuando Spinale comenzó a vomitar sangre, y aún así, fue enviado de vuelta a casa. Solo tras una llamada de emergencia debido a dificultades respiratorias, fue finalmente admitido en un hospital, donde los médicos se encontraron desconcertados ante sus síntomas. "Lo único que pudieron determinar es que estaba sangrando internamente", compartió su hermana en la página de GoFundMe creada para apoyar su tratamiento, donde lleva recaudados más de 8.600 dólares.

Lo que inicialmente parecía ser la menor de sus preocupaciones se convirtió en una lucha desesperada por su vida. Una bacteria rara invadió su torrente sanguíneo, provocando un fallo multisistémico. El avance rápido de la infección desencadenó un choque séptico, una caída crítica en la presión arterial post-infección, llevando a Spinale a una complicación tras otra, incluyendo la influenza A, neumonía bilateral y síndrome de dificultad respiratoria aguda (SDRA), que dejó sus pulmones incapaces de funcionar correctamente.

4% de posibilidades de sobrevivir

La infección séptica alcanzó su corazón, destruyéndolo, y también sufrió un leve derrame cerebral, complicaciones que le impedían ser sometido a cirugía dada la crítica naturaleza de su estado. Intubado y en coma inducido, la familia de Spinale enfrentó la devastadora noticia de que había muy pocas esperanzas de sobrevivir, con los médicos otorgándole apenas un 4% de posibilidades.

En un esfuerzo por mejorar su función pulmonar, fue colocado en una cama rotatoria especializada durante dos semanas, ayudando a aliviar la presión de sus pulmones llenos de líquido. Además, se le realizó una cirugía a corazón abierto para reparar el daño causado por la sepsis y se le insertaron drenajes en el pecho para eliminar el exceso de fluido.

"Los médicos no tienen la última palabra"

Contra todo pronóstico, tras un mes en coma y múltiples tratamientos, Spinale despertó sin daño cerebral, iniciando un largo camino hacia la recuperación. Dado de alta del hospital en silla de ruedas, su habilidad para caminar mejoraba hacia finales de 2023. "Todavía recuerdo cuando nos dijeron que estaba con muerte cerebral y que consideráramos desconectarlo. Los médicos no tienen la última palabra", reflexionó Michelle.