Según han informado hoy fuentes policiales, el pasado 28 de mayo un vecino de la urbanización Empuriabra de nacionalidad portuguesa salió hacia las ocho de la mañana de su casa sin más objetos personales que su NIE, el documento de identificación de los extranjeros.

Al ver que por la noche no había regresado a casa, su familia dio la voz de alarma y se inició un dispositivo de búsqueda en el que participaron agentes de los Mossos d'Esquadra, de la Guardia Civil y de la Policía Local de Castelló.

Durante toda la semana los grupos de búsqueda han peinado las zonas de los canales de Empuriabrava, los alrededores del río Muga, los Aiguamolls de Sant Pere Pescador, las playas de ambos municipios, e incluso investigaron si podía haber viajado a Portugal.

Todo el dispositivo había sido infructuoso hasta que anoche una patrulla de los Mossos de Roses encontró al desaparecido en un descampado de Castelló d'Empúries.

El hombre, que tiene una pierna ortopédica, presentaba claros síntomas de desnutrición, debilidad, llevaba la ropa sucia y estaba tan desorientado que no supo decir dónde había estado estos siete días, o si había comido o bebido.

Los agentes llevaron al vecino al ambulatorio del municipio y tras confirmar que, a pesar de todo, estaba en buen estado, fue derivado a un especialista para averiguar la causa de su desorientación.