Los vecinos de unas tres mil viviendas que engloba la zona de Las Filipinas (Plan Parcial Blue Lagoon), en San Miguel de Salinas, acordaron ayer reactivar sus movilizaciones y exigir de nuevo -como llevan haciendo cinco años- que la Conselleria de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda y el Ayuntamiento hagan salir por sus grifos agua no contaminada, con la que puedan cocinar y de la que puedan beber. Y vuelven a levantar la voz tras más de un año sin manifestaciones porque las constantes y recurrentes promesas de ambas administraciones (que les habían hecho pensar que el final de su problema había llegado) parecen haber quedado en nada, dicen.
Los presupuestos de la Generalitat no incluyen la obra de fontanería (pozo de bombeo, depósitos y red tuberías) que el anterior conseller, José Ramón García Antón, había anunciado públicamente que comenzaría en 2009. La redacción del proyecto se adjudicó en abril de este año (mediante un procedimiento negociado sin publicidad y por casi 69.000 euros), pero sin partida presupuestaria para 2010 dificilmente se podrá llevar a término, por lo que la primera acción inmediata que se plantean los vecinos, asesorados y ayudados por la Asociación de Vecinos San Miguel Arcángel, es solicitar a los responsables de Economía y Hacienda de los grupos parlamentarios (PSPV-PSOE, PPCV y EU) que enmienden los presupuestos para incluir esta obra.
Acto seguido, volverán a sus acciones de presión, a presentarse en los plenos municipales, a celebrar caravanas de protesta e incluso a viajar a Valencia para entrevistarse con el nuevo conseller del área, Juan Cotino.
"Vender humo"
Mientras tanto, la asociación de vecinos cree que todo lo que han hecho hasta ahora los responsables políticos ha sido "vender humo con continuas promesas de solución", y que la falta de presupuesto para solventar el suministro "es una muestra de desidia y del escaso peso, por no decir nulo, de la agrupación local del PP en las decisiones del Gobierno valenciano".
Los presupuestos de la Conselleria de Agua y Vivienda tienen una partida de 2,5 millones de euros para "ayudas a los ayuntamientos en la ejecución de obras hidráulicas de su competencia", aunque la asociación y los vecinos no creen que en ella se incluya la obra que reclaman porque la cantidad económica es "muy pequeña a repartir entre todos los pueblos de la Comunidad".
Informe oficial
La Asociación de Vecinos San Miguel Arcángel fue precisamente la que encargó en 2004 al Colegio Oficial de Farmacéuticos de Alicante un análisis de las aguas que evidenció "niveles de salinización y contaminación por nitratos muy por encima de lo admitido para consumo humano. Este informe fue verificado por el Consell ("responsable de la calidad del agua", subrayan desde la organización vecinal) y conllevó que Alcaldía ("responsable del suministro") decretará la no potabilidad de un agua que llevaba más de una década siendo consumida por los habitantes de 3.000 viviendas, y que cinco años después de las primeras denuncias públicas sigue siendo la que reciben.
Los afectados viven concretamente en residenciales como Blue Lagoon, Blue Hill, Eagle Nest, El Galán o Mirador Mediterráneo, y algunos de ellos manifestaron ayer que las características del agua provocan roturas constantes en las tuberías, y en consecuencia que sus calles estén levantadas por varios puntos abiertos para realizar unas obras que sólo han "parcheado" la red de suministro y su problema.
