La autogestión funciona desde 2009 en centros de atención primaria de Torrevieja y es el ejemplo que cita el nuevo conseller de Sanidad Luis Rosado a la hora de implantarlo en la Comunidad Valenciana. Un modelo para que los médicos de Familia "trabajen más y mejor", tomando el 90% de las decisiones, un margen que no existe en el sistema "convencional" y con una variable de incentivos económicos para los profesionales importante en función de resultados. La concesionaria privada de la gestión pública del departamento de Torrevieja (Ribera Salud-Asisa), dirigida por Frank Leyn, destaca los "criterios asistenciales y organizacionales", que mejoran la eficiencia, más allá de los aspectos económicos.

¿Y cómo funciona? En un sistema que motiva a los médicos de Familia para que realicen un seguimiento específico de sus pacientes en consulta y una atención domiciliaria posterior. Algo que se traduce, según fuentes del departamento, en una reducción de las derivaciones a medicina especializada -uno de los factores que más encarece la factura sanitaria-y elimina traslados, gestiones y colas molestas para los pacientes. Muchos casos se resuelven en los centros de salud y otras tantas urgencias también se quedan en atención primaria. Una reducción cuantificada en el 20% de las consultas especializadas al Hospital de 2009 a 2010 -momento en el que el anterior equipo de gerencia de Luis Barcia puso en marcha el modelo-. Pero también en una forma de trabajo en la que los médicos pueden salirse del encorsetamiento que define a la administración sanitaria. Compran el material fungible que necesitan, deciden sobre el gasto farmacéutico, e incluso sobre contrataciones de más o menos personal y sobre salarios, aunque siempre asumiendo los acuerdos con la Conselleria de Sanidad. El cumplimiento de sus propios objetivos, el margen entre el total de un presupuesto entregado y el gastado, se refleja en un "reconocimiento" a final de mes para los facultativos y personal de enfermería y un respiro para las maltrechas arcas sanitarias. Es el propio sistema el que regula el que no se abuse de esa "barrera" en la atención primaria. Un paciente que no recibe asistencia especializada cuando lo necesita puede terminar derivándose, a la larga, en una retahíla de consultas especializadas o un ingreso en el Hospital.

Costes

La autogestión aumenta además la "fidelización y salud del paciente, y la satisfacción, implicación y formación del profesional de atención primaria", según las mismas fuentes, además de ampliar la cartera de servicios en los centros de salud -cirugía menor, ecografías y retinografías-, y aumentar la prevención y promoción de la salud y un mayor control de los pacientes complejos, con el mismo objetivo, evitar una visita redundante al Hospital.

Los médicos y personal de enfermería toman decisiones en relación al paciente pero también sobre el 70% de los costes del sistema sanitario. Para ello se les da herramientas de gestión a los responsables de los centros de salud. Algo que se refleja "en beneficios tanto para el paciente", como para la medicina primaria y hospitalaria. En definitiva el conseller Luis Rosado, que rescató la iniciativa a la hora de anunciar recortes y que todavía no ha avanzado cómo quiere trasladarla a otros departamentos habría visto en este modelo y en un momento de crisis, una forma de conseguir mejores resultados con menores costes; más satisfacción para el usuario de la Sanidad, sin malgastar recursos innecesarios, controlando el presupuesto y sin recortar prestaciones.