El concejal de Los Verdes Manuel Culiáñez ha renunciado a su sueldo desde el 1 de agosto para incorporarse con dedicación exclusiva a su trabajo de educador social en la Fundación Diocesana San José Obrero, una institución del Obispado que integra un colegio, módulos formativos, centro de día y residencia para niños, entre otras funciones. Como concejal de gobierno, Culiáñez venía percibiendo desde junio de 2011 un sueldo de 40.000 euros anuales, igual cantidad que perciben el resto de ediles del equipo de gobierno. El alcalde cobra 48.000 euros, tal y como quedó aprobado por el pleno hace un año, y al primer teniente de alcalde le corresponden 43.000 euros anuales, aunque quien ocupa ese lugar, la concejala socialista Antonia Moreno, también renunció a su sueldo íntegro el 1 de julio para incorporarse con dedicación exclusiva a su trabajo como profesora de Secundaria.

La vuelta de los dos ediles a sus puestos anteriores fue precipitada por los intentos del PP de imponer con su mayoría en el pleno la retirada de sueldos de todos los concejales excepto dos y de los asesores y cargos de confianza del tripartito. El alcalde impidió en el último momento que se votara esta propuesta asegurando que tenía dudas sobre su legalidad, una decisión que el PP anunció que recurriría por considerar que era prevaricación administrativa. Sin embargo, la amenaza de que el asunto se votase en pleno y se perdiera llevó a varios ediles del equipo de gobierno a sondear la vuelta a sus trabajos anteriores y en ese periodo Culiáñez solicitó su reincorporación a la Fundación.

Cinco años

El concejal se encontraba en situación de excedencia desde hace cinco años, desde que se incorporó a la corporación como concejal de oposición y ocupó la única plaza de dedicación exclusiva concedida por el gobierno de Mónica Lorente (PP) al grupo municipal de Los Verdes entre 2007 y 2011, cobrando 27.000 euros anuales.

Actualmente dos concejales de la oposición cuentan con retribución por dedicación exclusiva (David Costa y Pepa Ferrando, del PP), con un salario de 25.000 euros anuales cada uno. Esos 50.000 euros sumados a los nueve ediles que tienen dedicación exclusiva (40.000 euros cada uno), a las dos concejalas de gobierno que cuentan con media dedicación (25.000 euros cada una -Ana Mas y Martina Scheurer-) y al alcalde suman 508.000 euros anuales que el Ayuntamiento de Orihuela destina a pagar a sus políticos. Se añaden otros 422.000 euros a distribuir entre 17 cargos de confianza de los tres partidos de gobierno con salarios entre 15.000 y 33.000 euros anuales.