El agente, C.M.I., se enfrenta a penas que suman 8 años de prisión por dos delitos de torturas (dos años de cárcel por cada uno) y otro de falsedad (cuatro años), así como 13 de inhabilitación y multa, según el escrito de calificación de la Fiscalía. Otros tres, V.H.C., M.A.P. y J.A.P. están acusados de un delito de torturas y a cada uno se le piden dos años de cárcel y 10 años de inhabilitación. Para un quinto agente, G.J.T., se solicitan 6 años de cárcel por un delito de torturas (dos años de prisión) y otro de falsedad (cuatro años) y 13 de inhabilitación. La Fiscalía mantiene sus acusaciones para tres agentes más -M.A.L., A.M.B. y J.M.B.- a los que acusa de un delito de omisión de perseguir delitos y les pide un año de inhabilitación. El primero de los tres, un inspector, también está acusado de un delito de falsedad y se le piden tres de inhabilitación. El entonces edil de Policía está acusado también de un delito de omisión de perseguir delito y se le pide un año de inhabilitación. Redacción