Los portavoces de los grupos de la oposición dejaron ayer plantados al alcalde, Emilio Bascuñana, en la rueda de prensa que ofreció para anunciar el nombramiento de Federico Ros como Caballero Cubierto de 2017, y lo hicieron para mostrar el rechazo, una vez más, al «caciquismo» con el que toma las decisiones, apuntó Marta Guillén, de Cambiemos Orihuela. Los portavoces volvieron a enterarse por la prensa del motivo de una convocatoria que se programó para ayer a las 14 horas, y que todos entendieron que tenía como objeto el trámite rutinario antes del pleno del jueves, y no el nombramiento del Caballero Cubierto, que conocieron horas después de que el alcalde se lo comunicara vía telefónica a Ros, sin consultar con la oposición.

Así, Carolina Gracia, la portavoz socialista, y Marta Guillén, que acudió como portavoz de Cambiemos, se negaron a acudir a la comparecencia de prensa después de mostrar una vez más su descontento al alcalde, pues, en este tipo de cuestiones, llueve sobre mojado. Los portavoces ya dijeron «basta» la semana pasada después de que se les convocara a otra junta de portavoces con apenas 15 minutos de margen. Cuando acudieron a la convocatoria, se encontraron en el despacho de Alcaldía con la familia de Atanasio Díe, el conocido dramaturgo oriolano que falleció hace unos días. El motivo de la convocatorio era el cambio de nombre del Teatro Circo para añadirle el sobrenombre de Atanasio Díe, propuesta de la que se enteraron, una vez más, cuando ya se había hecho efectiva, llamando a los familiares para realizar el anuncio ante los medios. Esto provocó una tensa reunión en la que los portavoces le pidieron al alcalde respeto, un respeto «al que ha vuelto a faltar nombrando unilateralmente, y sin consultar». Sí acudió a la comparecencia de prensa, Luisa Boné, en representación de C's, que forma parte del equipo de gobierno.