La concejal Rosario Martínez (PP) ha explicado hoy que esta formación ha presentado una moción el pleno del Ayuntamiento de Torrevieja para velar por los derechos lingüísticos en la Comunitat y para que "no haya discriminación negativa para los alumnos, en función del modelo lingüístico en el que reciban la enseñanza". Quince Asociaciones de Padres han recogido 2.000 alegaciones en contra del nuevo modelo, que no han sido respondidas por la Generalitat.

Martínez ha detallado que, desde el principio el PP ha tenido "muy clara su postura ante, lo que inicialmente fue un proyecto de decreto" y lo que, desde el pasado 6 de febrero, es una realidad: el modelo lingüístico educativo valenciano. Sin embargo, ha lamentado la edil "no tenemos ningún posicionamiento oficial de los diferentes partidos políticos con representación en este Ayuntamiento, algo que la comunidad educativa de Torrevieja echa de menos".

La concejal ha explicado que, desde que el pasado 21 de noviembre de 2016 se publicara el proyecto de decreto por el que se establece el modelo lingüístico educativo valenciano hasta hoy, el PP de Torrevieja ha realizado al respecto varias actuaciones, que van desde realizar preguntas al pleno, a presentar alegaciones al proyecto de decreto, mociones para su inclusión y debate en sesiones plenarias, "lamentablemente, todas estas actuaciones no han tenido respuesta".

El equipo de gobierno, a juicio de la edil, "sigue mirando hacia otro lado, haciendo oídos sordos y evitando el debate, todo esto con el beneplácito de C's y Sueña Torrevieja". El pasado 8 de febrero el grupo parlamentario popular presentó en el Congreso de los diputados, de la mano de Isabel Bonig y de Joaquín Albaladejo, una propuesta no de ley en defensa del castellano y contra la imposición lingüística. "Y tenemos que recordar que hace poco veíamos cómo el Defensor del Pueblo admitía a trámite la queja presentada por todos los diputados y senadores valencianos del PP", ha recordado.

La concejal ha manifestado que, en su opinión, "el PP sí escucha a la comunidad educativa de Torrevieja, y lo que es más importante, sí actúa para defender los derechos de las familias de su ciudad y a las pruebas me remito. Todavía está por ver qué han hecho el resto de partidos políticos de Torrevieja, ya que este no es un tema en el que el político se pueda mostrar neutro, aquí o se está a favor de la imposición o a favor de la libertad".

Martínez Chazarra ha justificado la presentación de la moción basándose en que el decreto organiza como "básicos" a los alumnos que estudien en castellano y "avanzados" a los que lo hagan en valenciano. Por otro lado, está ideado para que quien escoja castellano quede con un mínimo de horas en inglés, y quien opte por el valenciano en un nivel avanzado, al final del período formativo, obtendrá la acreditación del B1 en inglés y el C1 en valenciano.Presión por la exención

El decreto también contempla que cada uno de los centros tendrá que optar por un mismo nivel, con el objetivo de evitar cualquier tipo de discriminación del alumnado dentro del mismo centro. Sin embargo, no contempla como segregación las diferencias que implica el programa entre alumnos de distintos centros por elegir castellano o valenciano. "Si esto no es discriminar que venga Dios y lo vea", ha criticado la edil.

"Y lo que resulta escandaloso, es que se le esté diciendo a los centros escolares que cuantas menos exenciones al valenciano presenten sus alumnos, más material y más recursos tendrá el centro. Yo creo que aquí se puede tildar perfectamente al decreto de anticonstitucional", ha asegurado la edil. Este diario ha preguntado si esa directriz de Educación se ha trasladado a los centros por escrito y ha indicado que se trata del mensaje que la Conselleria está transmientiendo a los centros.

Este modelo de plurilingüísmo, al margen de las seis opciones de inmersión que puedan seleccionar los centros, de menos a más horas de valenciano e inglés, no suprime al derecho a la exención de valenciano de cada uno de los alumnos que recoge la ley de normalización lingüística de 1983 en zonas castellanohablantes.

"Por todo ello", ha proseguido, "proponemos al pleno la adopción del acuerdo de instar al Consell de la Generalitat Valenciana a velar por los derechos lingüísticos de los alumnos que libremente elijan el castellano como lengua vehicular; que no se utilice el idioma extranjero para premiar la elección de una u otra lengua cooficial; que garantice la libertad de los padres en la elección de la educación".

Martínez Chazarra ha indicado qu al PP le gustaría saber "si el alcalde ha escuchado la opinión del consejo escolar, si ha explicado en Alicante o en la Conselleria de Educación en Valencia, la posición de desventaja en la que quedan los alumnos de su ciudad con la puesta en marcha de este decreto. Nos gustaría saber si en definitiva qué va a hacer el Alcalde, si es que va a hacer algo".

Consejos Escolares

La mayor parte de los representantes de padres de alumnos en los consejos escolares van a reclamar que los colegios opten por el modelo básico, que en esencia mantiene las mismas horas de inglés y valenciano que el actual. La decisión final depende del voto de los profesores, por lo que alguno de los colegios podría seleccionar un modelo más avanzado, en función del número de votos entre padres y profesores. Las asociaciones de padres de forma mayoritaria se han mostrado en contra de este modelo, al igual que el PP, no solo por el hecho de que se ponga en marcha en una zona castellanohablante. También porque consideran que no tiene en cuenta la realidad demográfica de una ciudad en la que en los centros se da gran diversidad de nacionalidades.

Una de las dudas que plantean los padres es qué harán los alumnos exentos en centros que opten por un modelo avanzado en el que hay varias asignaturas en valenciano.