El Ayuntamiento de Torrevieja va a destinar 60.000 euros a la compra de tres radares fijos y ya está probando un lector de matrículas de vehículos móvil que se puede incorporar. Aunque se está ultimando la decisión definitiva, el área de Tráfico que dirige el edil Federico Alarcón (PP) cree que las ubicaciones más idóneas para estos dispositivos serían las avenidas de Cortes Valencianas y Desiderio Rodríguez. En ambas el volumen de tráfico que soportan de manera ordinaria es elevado y la aceleración con la que los vehículos enfilan sus largas rectas han obligado al municipio a poner en marcha medidas como la señalización lumínica de advertencia de pasos de peatones y la instalación de badenes para intentar reducir el exceso de velocidad y los accidentes. Los dos viales además cuentan con dos carriles por sentido de la circulación, son calles de obligado tránsito para quienes acceden al casco urbano de la ciudad y presentan numerosos puntos semafóricos y pasos de peatones.
El procedimiento de adjudicación contempla como mejora que las empresas especializadas puedan ofertar la entrega de un cuarto radar fijo. El Ayuntamiento de Torrevieja ya adquirió al principio de este mandato un radar móvil que ha ubicado sobre todo en zonas en que la experiencia de los agentes indica que se sobrepasan las limitaciones de velocidad en casco urbano, zonas que coinciden con las avenidas citadas. Un radar que tiene más carácter preventivo y que ha permitido al municipio indicar con señalizaciones la existencia de este control.
Las mismas fuentes del equipo de gobierno indicaron que el pasado viernes se puso en marcha el semáforo incorporado a la avenida de Desiderio Rodríguez, a la altura de la urbanización El Paraíso, demandado por los vecinos de este barrio y el de San Roque, después de que se hayan producido varios atropellos mortales en ese punto a lo largo de tres décadas. El último el de una pareja de turistas residenciales el pasado mes de agosto de 2021.
Coches robados
Los agentes de la Policía Local están probando también en sus patrullas diarias un dispositivo con tecnología de lectura de matrículas. Se trata de una herramienta con numerosas aplicaciones que sobre todo, permitirá ahorrar tiempo y recursos humanos para comprobar si los vehículos que se encuentren estacionados en lugares con señalización ocasional de prohibición de aparcar -indicadas 48 horas antes de un evento que necesite despejar la calzada como una procesión-, se encontraban estacionados antes o después de señalizarse. Un trabajo que el dispositivo realizará solo con el paso de la patrulla ordinaria por las calles por las que discurra el evento.
Esta tecnología tiene además otras aplicaciones. Por ejemplo, dentro de la labor rutinaria de patrullaje de los agentes por las calles, el dispositivo comprueba las matrículas y en caso de detectar un coche buscado -por un robo o cualquier otra circunstancia- emite una alerta.
También se está evaluando la posibilidad de que pueda emplearse para el control y sanción del aparcamiento limitado de Ramón Gallud, aunque esta posibilidad depende de poder delegar a SUMA las sanciones. Si se logra tramitar ese respaldo administrativo, solo bastaría con realizar pasadas cada dos horas para comprobar los vehículos que llevan más tiempo del permitido ocupando esa plaza. Ahora prácticamente solo se cumple esa limitación a mediodía y en horario nocturno. Muchos funcionarios y los propios comerciantes y usuarios de la zona emplean este aparcamiento como estacionamiento fijo, porque conocen que la posibilidad de sanción es muy reducida ahora.
