El granizo de septiembre diezma un tercio de la producción de limón en la provincia

La merma de producción alicantina se estima en 114.000 de las 360.000 toneladas aforadas y Asaja rebaja notablemente las expectativas optimistas de producción nacional para la actual campaña previstas por el Ministerio de Agricultura y la interprofesional del sector, que no llegará al millón de toneladas

El exceso de calor y la falta de agua durante el verano dejan unos frutos con menor calibre

Limones dañados por pedrisco.

Limones dañados por pedrisco. / INFORMACIÓN

Rubén Míguez

Rubén Míguez

En diez minutos se puede arruinar el trabajo y el esfuerzo de todo un año. Es lo que le ha sucedido a los agricultores de la Vega Baja que recordarán como uno de sus peores días el pasado 12 de septiembre. La tarde de ese día se volvía negra y una tormenta de granizo que apenas duraba diez minutos iba a dar al traste con la mayoría de la producción de limones en la comarca más productora del país.

El granizo que dañó la cosecha de este cítrico en casi todos los municipios de la Vega Baja, y en algunos de la Región de Murcia, rebaja notablemente las expectativas optimistas de producción nacional para la campaña 2023/2024. Asaja ya advierte de que la producción nacional del limón no llegará al millón de toneladas.

Limones afectados por la granizada en un campo de la Vega Baja.

Limones afectados por la granizada en un campo de la Vega Baja. / INFORMACIÓN

En la provincia de Alicante, esos 10 minutos granizando han acabado con un tercio de la producción del limón, uno de los productos principales de su huerta. Con una producción aforada de 360.000 toneladas de limón en la provincia, la merma de producción será de 114.000 toneladas. Casi un tercio.

Las condiciones meteorológicas adversas acontecidas el mes pasado han causado una merma muy significativa en la producción de limón, y por ello, Asaja Alicante, tras hacer un recuento de los daños, rectifica a la baja las cifras del aforo, de la producción prevista, de la campaña 2023/2024 anunciadas por el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, que lo situaba en 1.167.444 toneladas nacionales.

La Asociación de Jóvenes Agricultores de Alicante afirma que, ni siquiera, se llegará al millón de toneladas de limón a pesar del optimismo en las estimaciones del Ministerio y también de la Asociación Interprofesional del Limón y el Pomelo, que anunciaban un aforo de 1.365.000 toneladas en España. 

Por sorpresa

El fuerte granizo sorprendió a casi todos los municipios productores de limón de la Vega Baja: San Fulgencio, Dolores, Almoradí, Benejúzar, Orihuela, Algorfa, Jacarilla, Bigastro, Rojales, Albatera, Benijófar, Benejúzar, Callosa de Segura, Daya Nueva, Daya Vieja, Granja de Rocamora y San Isidro.

Provocó un siniestro en limón por pedrisco del 31,7% de la producción asegurada. De hecho, los técnicos de la asociación agraria alicantina cifran los siniestros en 18.972 toneladas distribuidos en 884,1 hectáreas.

Imagen del granizo que se ha recogido en Redován y Orihuela esta tarde

Imagen del granizo que se recogió en la Vega Baja el 12 de septiembre. / Información

El presidente de Asaja Alicante, y también productor de cítricos, José Vicente Andreu, ha sido testigo de cómo muchos agricultores han perdido prácticamente toda su cosecha en cuestión de diez minutos de granizo continuado.

A estos datos hay que añadir los daños por la "granizada histórica" en algunos municipios productores de limón de la Región de Murcia, por lo que, finalmente, el aforo nacional de limón "no llegará, ni por asomo, al millón de toneladas", señala Andreu. 

Calor y falta de agua

Además, el exceso de calor y la falta de agua durante los meses de verano, que es cuando el fruto adquiere grosor, ha propiciado que no se alcancen los calibres previstos, que se sitúan en torno a los 60 milímetros. "Actualmente, se están cortando del árbol limones muy pequeños para atender la demanda, limones que no superan los 50-55 milímetros, un tamaño que normalmente se desecharía, pero ahora se está comercializando", añade Andreu.

Aspecto de unos limones afectados por la granizada de septiembre.

Aspecto de unos limones afectados por la granizada de septiembre. / INFORMACIÓN

Este hecho también propicia una variación en los kilogramos de la producción estimada, pues estos cítricos más pequeños, evidentemente, pesan menos. Además, los golpes de calor han castigado a los árboles y han provocado, solo en la provincia de Alicante, una merma arbórea superior a una tonelada durante este verano. 

Precio

La asociación advierte, así, de que habrá una oferta inferior a la anunciada, por lo que los precios también deben ser más altos en origen. Por ello, pide a los agricultores que "no deben tolerar operaciones con precios a la baja por creer que habrá más producción de la real".

Ante esta merma, que ha sido corroborada con la conclusión de las peritaciones en campo, la asociación advierte que habrá una oferta reducida a la inicialmente esperada, y que los agricultores no van a admitir presiones de los compradores con precios a la baja. 

En limón hay 17.000 hectáreas cultivadas, 10.000 en naranja y 7.000 en mandarina, en toda la provincia de Alicante, siendo mayoritariamente la Vega Baja la que más superficie tiene.

Trabajos para cosechar en una plantación de limones.

Trabajos para cosechar en una plantación de limones. / HECTOR FUENTES

En cuanto a las exportaciones de cítricos, sobre todo del limón, se esperaba que sea una buena campaña, con un incremento del 20%. El mercado es, casi en su totalidad, europeo, a países nórdicos, Inglaterra, Francia, Italia o Suiza, tras el veto de EEUU, la venta residual en Canadá o las dificultades logísticas en países de Oriente. 

En precios, Asaja esperaba que la media se sitúe en los 50 céntimos durante toda la campaña. En ecológico, el limón duplicará ese precio, un tipo de producción cada vez más frecuente en la Vega Baja por su rentabilidad.

Sin asegurar

Asaja Alicante lamentaba el pasado mes, tras producirse la granizada, que alrededor del 60% de los cultivos dañados no cuentan con seguro agrario, ya que muchos agricultores han decidido este año no asegurar sus cosechas tras el endurecimiento de condiciones impuesto por Agroseguro, que ha suprimido la cobertura de los daños de calidad de viento en limón y la extensión de garantía.

Una plantación de limones en la Vega Baja.

Una plantación de limones en la Vega Baja. / TONY SEVILLA

Asimismo, añadía que este grave recorte cuenta con la complicidad del Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, encabezado por Luis Planas, quien a pesar de haber prometido públicamente que el seguro iría ganando coberturas, la realidad es la contraria, empujando así a muchos productores a no contratarlo, "quedando totalmente desprotegidos y expuestos ante fenómenos meteorológicos adversos, con la pérdida de rentabilidad que ello conlleva", señalaba la asociación.