Acuerdo entre Alicante y Países Bajos para divulgar la leyenda de los regalos de San Nicolás

El alcalde de la ciudad y el embajador neerlandés en España pactan en Alicante extender la historia de "Santa Claus" como un santo que parte en barco desde la ciudad mediterránea

El embajador neerlandés y el alcalde de Alicante, durante el acuerdo de San Nicolás.

El embajador neerlandés y el alcalde de Alicante, durante el acuerdo de San Nicolás. / INFORMACIÓN

Alberto Losa

Alberto Losa

El embajador de los Países Bajos en España, Roel Nieuwenkamp, ha estado presente este viernes en Alicante, donde se ha reunido con el alcalde de la ciudad, Luis Barcala, acompañado por el cónsul Erik de Haan. Embajada y alcaldía han llegado a un acuerdo para difundir la leyenda de San Nicolás como portador de juguetes para los más pequeños. Según la tradición neerlandesa, San Nicolás zarpa en barco desde España para entregar juguetes a los niños de los Países Bajos.

Durante su visita a Alicante, el embajador de los Países Bajos ha contemplado diferentes enclaves de la ciudad, como el macho del Castillo de Santa Bárbara, aunque el ascensor que permite acceder a la fortaleza lleva sin funcionamiento desde hace un mes y medio. Con el acuerdo alcanzado con los Países Bajos, la leyenda de San Nicolás relacionada a Alicante se divulgará entre los niños del territorio neerlandés.

Alicante ha recordado esta leyenda en otras ocasiones. En la Navidad de 2019, quedó plasmada en un videomapping que se proyectó en la fachada principal del Edificio Barroco del Ayuntamiento de Alicante, aunque no se ha vuelto a realizar.

De San Nicolás a Santa Claus

El culto a San Nicolás se remonta al siglo XVII, cuando tanto en Alicante como en otras zonas de Europa, como los países nórdicos o Rusia, se extendió el culto a este santo, patrón de la ciudad. Por su generosidad y amabilidad para con los necesitados y los más pequeños fue llamado "el obispo de los niños", a quienes poco a poco fue repartiendo su fortuna personal.

Según la leyenda de San Nicolás, en los primeros días de diciembre partía el barco Spanje —"España" en el idioma neerlandés— hacia en norte de Europa, con San Nicolás a bordo. Las historias cuentan que sus bodegas iban repletas de regalos, desde juguetes y dulces hasta naranjas o mandarinas. Su objetivo, según la tradición, siempre se cumplía a pesar de la peligrosa travesía, en la que tenía que sortear fuertes vientos, altas olas y las intensas corrientes del océano Atlántico; hasta llegar a su destino en el que repartía sus regalos a los niños.

La leyenda de San Nicolás se ha expandido por gran parte del mundo a través de la tradición familiar neerlandesa, llegando incluso a países como Estados Unidos. Sus orígenes están en Alicante, como se ha acordado divulgar, y su nombre fue derivando en las diversas tradiciones de San Nicolás a Sinter Klaas o San Nikolaus, hasta acabar siendo conocido como Santa Claus.