A los alicantinos la economía nos quita el sueño

En la provincia es donde peor se duerme de la Comunidad por la precariedad. Las unidades del sueño tratan cada vez más casos de síndrome de apnea obstructiva por el aumento de la obesidad. Entra en vigor el horario de verano

Esta pasada noche ha entrado en vigor el horario de verano

Esta pasada noche ha entrado en vigor el horario de verano / Freepik

J. Hernández

J. Hernández

En la provincia de Alicante se duerme peor que en el resto de la Comunidad Valenciana. ¿Qué hay detrás de tanto insomnio? Los profesionales coinciden en que la inestabilidad en un territorio con altos niveles de temporalidad y bajos salarios causa episodios de estrés que llevan al insomnio agudo; y este se suma al crónico que está detrás de los casos de depresión y ansiedad disparados desde la pandemia.

El caso es que en 2022 el 61% de las consultas a las unidades del sueño que hay en los departamentos de salud del sistema sanitario público de la Comunidad se atendieron en la provincia de Alicante (fueron 36.400 de un total de 59.500 en toda la Comunidad). En la misma línea, de los 35.200 pacientes que llegaron al sistema hospitalario por problemas de sueño, 20.900 lo hicieron desde localidades alicantinas, un 60%.

Las unidades del sueño de la provincia tratan más episodios de insomnio por la inestabilidad económica y laboral; y a pacientes que no logran conciliar el sueño por problemas relacionados con la salud mental.

Las consultas y unidades del sueño de los departamentos de salud también tratan a un mayor número de pacientes que sufren síndrome de apnea obstructiva relacionada con la obesidad.

Junto al insomnio es el trastorno del sueño más frecuente y conforme aumentan los casos de personas con exceso de peso más síndromes de este tipo se detectan y más demanda de sospecha hay. Una problemática en la que inciden los especialistas con motivo del Día Mundial del Sueño, promovido por la Sociedad Mundial del Sueño, con el lema "Dormir es esencial para la salud"; y por el cambio de hora al horario de verano, que ha tenido lugar esta pasada madrugada.

La apnea obstructiva es peligrosa. Consiste en hacer pausas de respiración por la noche y se asocia mucho con el ronquido. Puede provocar microdespertares del cerebro, hasta 40 en una hora, lo que impide que entre en la fase profunda del sueño.

Al no descansar por la noche, las personas que lo padecen tienen somnolencia durante el día y llegan a quedarse dormidas conduciendo o trabajando. Esto a corto plazo, porque a largo plazo incrementa la frecuencia arterial cardiaca y provoca un mayor riesgo de infarto o ictus, es decir, de enfermedad cardiovascular, tal y como explica la doctora Sara Giménez, residente de cuarto año del Servicio de Neurofisiología del Hospital General Doctor Balmis de Alicante.

"Cada vez hay más casos de apnea obstructiva por la pandemia de la obesidad, que a corto plazo produce insomnio y a largo plazo problemas cardiovasculares"

Sara Giménez

— Residente de cuarto año del Servicio de Neurofisiología del Hospital General Doctor Balmis de Alicante

El insomnio es muy prevalente en la sociedad actual y en los casos de cronicidad va de la mano de la depresión y la ansiedad, que "han empeorado mucho desde la pandemia", señala la médico residente en base a su experiencia de los últimos cuatro años.

Asimismo, indica que todas las situaciones de estrés puntual, como las causadas por problemas económicos o laborales, causan episodios de insomnio agudos que normalmente se tratan por el médico de Familia en el sistema de Primaria. Se derivan a las Unidades del Sueño hospitalarias si se cronifican.

La doctora Sara Giménez, en la Unidad del Sueño del Hospital General de Alicante

La doctora Sara Giménez, en la Unidad del Sueño del Hospital General de Alicante

El psicólogo David López indica por su parte que "hay trastornos de ansiedad generalizada en los que se produce una preocupación excesiva por las cosas del día, y dentro de ellas un foco muy importante es el dinero y la economía Las personas con una preocupación desmesurada con respecto a estas situaciones creen que pueden pasar cosas negativas, y la parte económica puede ir a peor; y anticipan ese tipo de preocupación como prevención".

"Ese miedo -prosigue- llega a consulta, donde nos encontramos a diario personas con trastornos de ansiedad generalizada que tienen un pensamiento muy preocupante, y miedo, por si no pueden pagar la hipoteca o pierden el empleo. Cuando llega la noche muchas veces les va generando un problema de insomnio contundente porque no puede dejar de darle vueltas a ese tema recurrente".

"El miedo al tema económico llega a consulta, donde nos encontramos a diario personas con trastorno de ansiedad generalizada que tienen un pensamiento muy preocupante sobre el dinero y la economía"

David López

— Psicólogo

Horario de verano

Esta pasada madrugada hemos cambiado el reloj al horario de verano. Los expertos en sueño alertan de que tener más tiempo de luz natural puede afectar al descanso y causar ciertos desajustes a determinados colectivos, especialmente a personas de edad avanzada y menores, quienes ya sufren trastornos como el síndrome de piernas inquietas o el insomnio; y a profesionales que trabajan a turnos.

En la mayoría de los casos, como aclara el jefe del Servicio de Neurofisiología y de la Unidad del Sueño del Hospital Universitario de la Ribera, Javier Puertas, se trata de un problema pasajero comparable al que puede sufrir cualquier persona que atraviesa rápidamente varios husos horarios. Los síntomas, de hecho, son los mismos que en el "jet lag": dificultad para conciliar el sueño por la noche, somnolencia por el día, cansancio, irritabilidad o falta de concentración.

Al respecto, la residente en Neurofisiología Sara Giménez señala que, con el cambio de hora, el que anochezca más tarde supone que se prolongue la actividad física más allá de lo recomendable. Por ejemplo, en el caso del deporte, lo idóneo es no practicarlo por encima de las 20 horas (o terminar tres horas antes de acostarse) puesto que, de lo contrario, aumenta el insomnio.

Además, en las primeras semanas será aún de noche cuando la mayoría de la población se levante de la cama, lo que hará que se empiece el día y, por tanto, la jornada laboral y escolar, con más sueño ante la falta de luz solar, inhibidora de la secreción de melatonina, hormona cuya producción y liberación en el cerebro está relacionada con la hora del día: aumenta cuando está oscuro invitando al descanso y disminuye cuando hay luz.

El sueño ayuda a superar las vivencias desagradables, consolidar la memoria, solucionar problemas y eliminar productos de desecho del metabolismo cerebral como algunos tipos de proteína cuyo acúmulo se relaciona con algunas formas de demencia.

De ahí que los expertos aconsejen acudir al especialista a las personas que duermen muy poco, demasiado, en situaciones inapropiadas o hacen cosas extrañas durante el sueño.