Entrevista | Mari Ángeles Medina Presidenta de la Sociedad Valenciana de Medicina Familiar y Comunitaria

"Hay estudiantes que cambian de especialidad por la falta de glamour de la Medicina de Familia"

La presidenta de la Sociedad Valenciana de Medicina Familiar afirma que la medida de los 35 pacientes por facultativo no soluciona el exceso de cupo. La médico señala que la gente va más a consulta por el malestar emocional de la sociedad actual

Mari Ángeles Medina, presidenta de la Sociedad Valenciana de Medicina Familiar y Comunitaria

Mari Ángeles Medina, presidenta de la Sociedad Valenciana de Medicina Familiar y Comunitaria / Rafa Arjones

J. Hernández

J. Hernández

La presidenta de la Sociedad Valenciana de Medicina Familiar y Comunitaria reivindica más apoyo a la Atención Primaria para que sea atractiva para los MIR y que se articulen medidas efectivas para atender el excedente de pacientes.

¿Sigue habiendo colapso en las consultas?

Con el buen tiempo están bajando el número global de consultas diarias. Además, no acuden tantos pacientes sin cita. En nuestro nivel asistencial, los inviernos son "temporada alta". Pero desde la pandemia ha desaparecido la estacionalidad, siempre tenemos mucho trabajo o muchísimo. Se mantienen sin tregua niveles muy altos de presión asistencial, según cifras de Conselleria, con un 20% más de demanda. Antes del covid aprovechábamos el buen tiempo para retomar e insistir en la cronicidad. A ver si esta primavera-verano retomamos cierta normalidad.

¿Por qué va más la gente al médico ahora?

Porque estamos todos muy tensionados, psicológicamente también. Teníamos la esperanza de que la población pudiera haber aprendido, gracias a la pandemia, cómo autogestionar mejor su salud pero esto sin embargo no lo hemos conseguido. Una de las cosas positivas que podría haber quedado de todo esto es la mejora de la educación sanitaria de la ciudadanía, pero se sigue consultando por motivos que les preocupan y que podrían ser perfectamente de autogestión. Lo que antes las abuelas te decían: "quédate en casa y tómate algo caliente". En general, las personas no toman las riendas de su propia salud y eso sería lo deseable para dolencias conocidas y repetitivas. Año tras año tenemos que volver a explicar que tenemos tres o cuatro catarros por invierno, estadísticamente eso es así. Y siempre su manejo es igual, nada nuevo. Tenemos que aprender a reconocer los motivos de alarma y en ese caso, sí consultar. Obviamente con toda la flexibilidad que cada caso precise, pero en general, aplicando el sentido común. Nos gustaría que la educación para la salud fuera un tema que se abordara de manera transversal a nivel político, por Sanidad, Educación y Trabajo, porque también vienen pacientes a por justificantes cuando no pueden ir a trabajar un día, por ejemplo, porque tienen fiebre.

"La población podría haber aprendido, gracias a la pandemia, cómo autogestionar mejor su salud y sin embargo en eso no hemos conseguido aumentar la educación sanitaria de la ciudadanía"

¿Cómo se podría abordar?

En países del entorno europeo la gente hace una autodeclaración de salud y el empresario lo acepta. El trabajador no tiene por qué mentir, somos una sociedad madura. Necesitamos ese cambio legislativo porque a día de hoy al trabajador se lo siguen pidiendo, y como se lo siguen pidiendo y le descuentan mucho o le despiden, al final todo nos repercute en el día a día a los médicos de familia. En Europa esa autodeclaración de salud tiene la misma validez jurídica que una baja. Es un tema que también está encima de la mesa.

¿No se puede hacer por internet?

Parte del proceso se puede hacer por internet. Son soluciones que se pusieron durante el covid, cuando las empresas se podían descargar el parte de la página web del INSS (Instituto Nacional de la Seguridad Social). La pandemia fue desastrosa y catastrófica pero algunas cosas buenas tuvo en la parte de gestión, como medidas de agilidad para las bajas laborales . En el fondo eran cosas que veníamos pidiendo para ser más eficientes desde hacía años. Hubo que ser más ágiles y ahora ha terminado la pandemia y damos pasos atrás cuando no debemos dar ni un paso atrás en la Atención Primaria porque lo único que necesitamos es avanzar y mejorar.

"Hubo que ser más ágiles en la pandemia. Termina y damos pasos atrás cuando no debemos dar ni un paso atrás en la Atención Primaria porque lo único que necesitamos es avanzar y mejorar"

¿Se está notando en Medicina de Familia una mayor demanda de atención en salud mental?

Es también una de las causas de por qué consulto si me siento mal. El malestar emocional, que así se llama. Hay que diferenciar los problemas de salud mental graves y los del día a día. Las personas se sienten desbordadas después de la pandemia, en un momento de incertidumbre económica pero también, social, política...Todo ello cuando estás así somatizas más. Las somatizaciones son síntomas reales con un origen más emocional que físico. Las personas se ponen en el peor de los casos, se transmiten bulos, se extienden más rápidamente las malas noticias que las buenas. Diariamente se hacen millones de mamografías normales, pero sólo nos enteramos de las mujeres que tienen cáncer de mama. En general, las dolencias son leves, pasajeras, y hemos de saber autogestionarlas. Intentar no medicalizar la vida y tener unos hábitos saludables de alimentación, no fumar y hacer ejercicio para evitar la mayoría de las enfermedades.  

¿Por qué busca la población apoyo en Atención Primaria?

Las personas se desbordan y vienen a Atención Primaria porque somos los más accesibles. Los apoyos sociales también fallan, la comunitaria, que es nuestro gran ámbito de actuación, no la estamos haciendo como deberíamos. Hacemos muchas menos de esas intervenciones como antes por grupos de edad, para personas mayores, para mujeres, para padres y madres con niños pequeños...Lo mismo que digo 20 veces en consulta a 20 personas diferentes, juntarlas y hacer intervención comunitaria. Ahora mismo la atención sanitaria del día a día se come todo el tiempo y no tenemos la capacidad de llegar fuera de las consultas. Nos metemos en ese círculo vicioso, no salimos a la calle, y como no salimos la gente tiene que venir más dentro cuando las soluciones también están fuera. Porque la prescripción social a una persona con malestar emocional, por ejemplo, de hacer ejercicio, de apuntarse a un colectivo, a una ong, a grupos de autoayuda es más costo eficiente y con menos efectos secundarios que medicalizando las cosas de la vida, que tiene grandes riesgos. La vida es dura pero es mejor intentar solucionar los problemas de otra manera que pedirnos una pastilla para la ansiedad, no es buena solución esa.  

"La prescripción social a una persona con malestar emocional, por ejemplo, de hacer ejercicio, de apuntarse a un colectivo, a grupos de autoayuda es más costo eficiente y con menos efectos secundarios que medicalizando las cosas de la vida"

¿Cómo valora el pacto con Sanidad que limita las agendas de pacientes a los médicos?

La sociedad científica a la que represento (Sociedad de Medicina Familiar y Comunitaria) ha publicado un documento con 60 medidas para bajar la presión asistencial. El problema que tenemos es muy multifactorial. No hay una varita mágica. Hablan de 35 pacientes por consulta. ¿Qué pasa con el paciente 36, quién le ve? Nos preocupa que no se arbitren a la par que algunas medidas que se han tomado en Mesa Sectorial soluciones al exceso de cupo. Y, ¿por qué no se aplica ya la jornada laboral de 35 horas como se ha hecho en otras comunidades autónomas? En Madrid se ha hecho en dos meses, ¿por qué aquí se tiene que hacer en dos años? Se van a dar más días libres en vez de quitarnos los sábados, medida ya vigente en otras comunidades. Pero es que esos días libres nos vamos a tener que sustituir entre nosotros mismos…más sobrecarga y menos continuidad asistencial. Los profesionales necesitamos un golpe de efecto, tres o cuatro cosas que los médicos de Familia veamos que se nos tiene en cuenta y se nos cuida.  

¿Es una medida a medias?

Esto de las horas y de las agendas es una medida muy significativa pero no se puede tomar a medias. Dentro de dos años podemos estar hablando de otro escenario político o de otra Atención Primaria. La necesidad es ya y esto de fiárnoslo a dentro de dos años nos preocupa. No entendemos por qué, ya que pensamos que sí se puede con voluntad política. Y lo de las agendas lo mismo. ¿Qué haremos con los pacientes a partir del 36? ¿Qué haremos con ellos, quién los va a ver? Lo que no puede ser es que repercuta en más agresiones hacia nosotros. Si esto se estipula así, sin más, y corto en el paciente 35, se nos quejan también a nosotros, que somos los más accesibles. 

¿Faltan estudiantes de Medicina?

Lo que faltan son especialistas. España es uno de los países europeos con más facultades de Medicina. Estudiantes hay. Luego está la conversión, el embudo, hasta que finalmente ese estudiante tiene un puesto de trabajo en un centro de salud, que es nuestro ámbito laboral, ese embudo se va estrechando con la falta de prestigio y la inestabilidad laboral. Ellos ya ven este ruido de fondo que envuelve a nuestra especialidad y se plantean el no hacerla, a pesar de ser la mejor valorada en sus prácticas. Algunos incluso se cambian de especialidad o cuando acaban, vuelven a hacer el MIR y otra especialidad, y todo viene por la falta de glamour que tiene la medicina de Familia respecto a la atención hospitalaria. También es cierto que tenemos muchas competencias. Somos tan versátiles que lo mismo los contratan (a los médicos de Familia) para las Unidades de Hospitalización a Domicilio que para los servicios de Urgencias que para las mutuas o la medicina privada. Es gente joven que quiere trabajar y si no le ofreces un contrato con unas condiciones se buscan la vida aquí o en el extranjero. Se han criado de Erasmus y de intercambio, y no tienen empacho en coger la maleta e irse. Hay que fidelizarlos. Estudiantes de Medicina hay pero la situación de la Primaria tiene muchos condicionantes.

¿Qué opina de la jubilación activa que ha propuesto Conselleria?

Quiero puntualizar que la medicina de Familia y Comunitaria no está en crisis, lo que está en crisis es el sistema sanitario. Nuestra especialidad sigue siendo igual de importante. Estos médicos que se están jubilando, que son por cierto de las primeras promociones de medicina de Familia vía MIR, profesionales excelentes, con gran experiencia, algunos no tienen la misma capacidad física para desarrollar la profesión en las condiciones tan penosas en que se está pasando ahora consulta en los centros de salud. Nosotros empezamos con veintipico años haciendo una actividad y nos jubilamos haciendo la misma, no hay una progresión. No es como en atención hospitalaria que el médico tiene al menos la opción de pasar a ser jefe de sección, de servicio, consultor, director, jefe de residentes, tutor et....Es duro con más de 60 años seguir haciendo lo mismo pero con menos medios y menos tiempo, y es una pena que los perdamos porque efectivamente podrían quedarse. Las capacidades intelectuales pueden estar intactas pero no es lo mismo hacer visitas a domicilio a un cuarto sin ascensor con 28 años que con 68, y es lo que se les ofrece. Hay que mejorar nuestra progresión profesional en los centros de salud igual que hay otros campos en la atención hospitalaria.