Solo 30 vecinos de Alicante pueden usar el taxi a demanda en su primer mes

El taxi a demanda (TAD), uno de los servicios más demandados en los últimos años por los vecinos de las partidas rurales, se encuentra estancado en su fase inicial: solo una treintena de vecinos puede hacer uso del transporte que se encuentra en periodo de pruebas desde hace un mes.

En el mes de mayo, el bipartito de Alicante logró acelerar la puesta en marcha del servicio -que estaba previsto para el mes de julio pero arrancó justo a tiempo para las elecciones- aunque fuese únicamente en una primera "tanda" de apenas treinta voluntarios, cinco por cada una de las seis líneas de este medio de transporte.

La idea original de la Concejalía de Transportes, dirigida por el edil del PP y número dos de Barcala, Manuel Villar, era que este periodo a modo de test se extendiese únicamente durante unos quince días, para que la puesta en marcha definitiva pudiese llevarse a cabo antes de la cita electoral del 28M.

Sin embargo, una semana más tarde de los comicios, los 30 voluntarios siguen siendo los únicos (de entre los 8.000 vecinos que se estima que residen en las pedanías) que pueden hacer uso de estos taxis.

Un transporte que, en su primer día de prueba, cosechó un gran "éxito" entre los vecinos que pudieron disfrutar de una conexión con el núcleo urbano de la ciudad a precio de autobús o TRAM, según aseguró a este diario María López, una de las vecinas encargada de poner a prueba el funcionamiento del servicio.

A pesar de que todo parece listo para que los taxis empiecen a conectar Ciudad Jardín con las diferentes partidas, según señalan los vecinos, la aplicación móvil para gestionar los trayectos aún no está lista para ofrecerse al público general, por lo que los únicos que, por el momento, tienen acceso al TAD son los treinta voluntarios iniciales.

No obstante, la empresa a cargo del servicio señala que no existe ningún problema con la app, sino que se ha acordado ampliar el periodo de prueba hasta después de Hogueras. Este diario también ha tratado de ponerse en contacto con el Ayuntamiento para conocer su punto de vista sobre la situación en la que se encuentra el TAD, pero desde el entorno del edil Manuel Villar se ha rechazado ofrecer declaraciones al respecto.

Sin parada en San Vicente

Al margen de estas primeras valoraciones, el TAD también ha cosechado otras críticas además de la demora en su arranque oficial para el resto de la población de las partidas rurales. Entre las principales reivindicaciones de los vecinos, destaca la conexión con poblaciones como San Vicente o Torrellano. Muchos de los residentes en pedanías como El Moralet, La Alcoraya, Cañada del Fenollar o Fontcalent acuden habitualmente a otros municipios distintos de la capital de la provincia, donde tienen servicios como su centro de salud, sus entidades bancarias o su oficina de Correos habitual.

A pesar de ello, las condiciones del Taxi a Demanda impiden que puedan desplazarse hasta estos servicios mediante el sistema TAD, ya que «no se podrán realizar paradas en puntos que no estén autorizados» y queda prohibido «pretender alterar el recorrido o paradas establecidas en la reserva».

Un problema para el que, según anunció el concejal del área tras una reunión de seguimiento del convenio del Transporte Alicante Metropolitano, tanto la Generalitat como el Ayuntamiento han mostrado "voluntad de resolver esta demanda vecinal". Sin embargo, tras la jornada electoral del 28M (que probablemente conllevará un cambio de color político al frente del Consell) los avances en esta materia han quedado paralizados.