La plaza del Ayuntamiento de Alicante: ni agua, ni árboles, ni bancos

La pérdida del mobiliario urbano es la última que sufre este espacio, en el que los chorros de las fuentes no funcionan desde hace años

La plaza del Ayuntamiento, este miércoles.

La plaza del Ayuntamiento, este miércoles. / PILAR CORTÉS

Alberto Losa

Alberto Losa

Una plaza del Ayuntamiento que pierde su color, sus zonas verdes y hasta su agua. La imagen del espacio que se ubica entre el edificio consistorial y la Audiencia Provincial es la de una solanera que, por no tener, no tiene ni los naranjos por los que peleó la exalcaldesa Sonia Castedo. Los chorros de las fuentes tampoco funcionan. Y el Ayuntamiento no se pronuncia al respecto.

Concejales como el socialista Raúl Ruiz han denunciado a través de sus redes sociales esta situación. Asegura que, desde que Luis Barcala es alcalde, "permitió que el paso de camiones rompiese la fuente, puso árboles-maceta de quita y pon y que solo se ven en invierno y ahora también quita todos los bancos que había". Ruiz lamenta que esta situación deja una ciudad de "mantita, peli y quedarse en casa".

La plaza del Ayuntamiento sufrió un cambio radical en la etapa de Castedo como alcaldesa, cuando pasó de convertirse en un aparcamiento para coches a una plaza moderna, con elementos de arbolado, bancos para que los peatones pudieran sentarse y varias fuentes. Un aparcamiento que estuvo funcionado hasta principios de 2009, cuando se reformó la plaza por 1,6 millones de euros.

Todos estos cambios, que entonces supusieron una revlución para el espacio, se mantuvieron prácticamente intactos durante los últimos 14 años. Las dos filas de naranjos que instaló Castedo fueron retirados y vueltos a poner en alguna ocasión, las fuentes dejaron de funcionar en otras y los bancos seguían estando a disposición del peatón.

La plaza del Ayuntamiento tras su reforma en 2009.

La plaza del Ayuntamiento tras su reforma en 2009. / PILAR CORTÉS

Ahora, no hay ninguna de las tres: ni bancos, ni árboles ni agua en la fuente.

Puesto este medio en contacto con el Ayuntamiento de Alicante, no ha explicado los motivos por los que estos elementos han desaparecido de la plaza.

Eliminar la fuente

Ya en 2020, el gobierno local de Barcala, entonces junto a Ciudadanos en un bipartito, se planteó eliminar la fuente ornamental del Ayuntamiento. Los motivos a los que aludían entonces es que su mantenimiento era muy costoso por las continuas averías. Algunos técnicos abogaban por su eliminación ya que los surtidores se estropean continuamente por el constante montaje de escenarios en la plaza para actos públicos, la entrada de camiones y las altas temperaturas que se alcanzan durante la Cremà de la Hoguera Oficial.

Esta fuente ornamental formada por 20 surtidores de agua se instaló en 2009 coincidiendo con la remodelación de la plaza consistorial. El pavimento fue restaurado en 2012 para eliminar las marcas de ceniza que había dejado la foguera, pero unos pocos años después estaba lleno de grietas y hundimientos. Las altas temperaturas alcanzadas cada noche del 24 de junio en la quema del monumento de Hogueras, que pueden rozar los 250 grados, derritieron los mecanismos situados bajo las baldosas. Los surtidores llevan años sin manar agua.