El turismo de cruceros aspira a otro año récord y un impacto de más de 60 millones en la provincia

Un informe señala que el pasado año la actividad movió en la Costa Blanca 46 millones 

La seguridad y la limpieza es lo que más valoran los cruceristas, que reprochan la falta de retretes públicos y zonas wifi

Turistas desembarcando de un crucero el pasado verano en Alicante.

Turistas desembarcando de un crucero el pasado verano en Alicante. / Alex Dominguez

J. A. Martínez

J. A. Martínez

El turismo de cruceros aspira a cerrar otro año de récords en la provincia de Alicante, con la llegada de 230.000 turistas y que generarán un impacto económico de 60 millones. Estas son las estimaciones de la Asociación Alicante Costa Blanca Turismo y Cruceros que ha presentado este lunes las conclusiones de su último estudio con el impacto económico y social del sector, con una previsión de un crecimiento de 30 por ciento. La temporada alta de cruceros arranca este sábado en plena Semana Santa con la llegada de dos barcos que dejarán 3.000 cruceristas.

Si este pasado 2023, los 205.000 turistas que llegaron a la provincia en estos barcos se dejaron 45,9 millones de euros; este 2024 el gasto se dispararía a los sesenta millones. La terminal de cruceros de puerto recibirá 96 cruceros frente a 84 del año pasado, de 21 navieras distintas (en 2023 fueron 15), entre las que MSC fue una de las primeras en apostar por la provincia de Alicante. Para medir este impacto se ha valorado, tanto el gasto de los cruceristas como de la tripulación, así como los servicios de las navieras consignadas, la inversión pública en cruceros y la actividad aeroportuaria, por turistas que han llegado en avión a la ciudad para embarcar.

Los estudios realizados por la asociación cifran en gasto medio por turista durante una escala en la ciudad en 74,66 euros. Un gasto que se eleva a 246,04 euros cuando se trata de barcos que tienen Alicante como puerto base antes de iniciar su travesía. El director de la asociación, Roberto Martínez, llamó la atención también sobre la tripulación que forma parte de esos cruceros, que aportaron otras 80.000 visitas a la ciudad el año pasado, con un gasto medio de 109 euros.

Según el estudio, la edad media de los cruceristas es de 52,69 años. Por edades, un 12,21 % tiene entre 0 y 30 años; el 19,24 % entre 30 y 45 años; un 29,67 %, entre 45 y 60 años; un 32,67 %, entre 60 y 75 años; y el 6,11 % es mayor de 75 años. El estudio desvela que el 56,61 % eran mujeres y el 46,39 % hombres. En cuanto el tipo de viaje, un 55,43 % vinieron en familia y el 33,40 % en pareja. Un 5,19 por ciento de los cruceristas vinieron solos y el 9,98 % con grupos de amigos. En cuanto a los motivos del viaje, un 60 % vino por el destino; el 20 % por el precio; y un 20 % porque les interesaba el viaje del crucero. Las encuestas han detectado cincuenta nacionalidades diferentes entre estos turistas, donde la mayoría son del Reino Unido (27,43 %), Estados Unidos (16,65 %) y España (10,49 %). En torno al 7 por ciento están Alemania e Italia.

El estudio se ha llevado a cabo con encuestas a pie de barco al término de la excursión, entre un total de 2.468 cruceristas. En estas encuestas, los aspectos mejor valorados son la seguridad (un 4,6 sobre 5); el transporte en lanzaderas hacia las zonas de excursión y la limpieza de la ciudad empatan con una nota de 4,4; y el clima tiene un 4,3. En el apartado de las quejas, está la falta de zonas de sombra en el trayecto entre la terminal de cruceros y el centro; así como la mejora de las redes wifi públicas en la terminal, un aspecto que se va a mejorar con la reforma de las instalaciones que se va a poner en marcha las próximas semanas. Los turistas también consideran que está mal promocionada la oferta museística y de zonas comercias y se quejan de la ausencia de baños públicos en la ciudad, obligándoles a tener que entrar en locales de hostelería cuando tienen alguna necesidad fisiológica. Hay otras cosas en los que estos turistas piden mejoras: la apertura del comercio local entre las 15.00 y las 17.00 horas, para poder hacer las compras cuando terminan la excursión, instalar un duty free en la terminal de cruceros, como ya las que ya existen en los aeropuertos; mejorar los accesos al castillo de Santa Bárbara; y el servicio de lanzadera al centro de la ciudad.

Un dato destacado es que el 94 por ciento de los encuestados no han visto la provincia como un destino saturado, es decir, que consideran que los turistas de cruceros no están colapsando la ciudad, explicó José Pedro García Cerdrán, responsable de Becode Digital, la empresa que se ha encargado de la digitalización de las encuestas. . Los encuestados han valorado la gran gama de puntos turísticos que ofrece la provincia. Hay un 71 por ciento que tienen la intención de volver a la provincia.

Excursiones

La excursión más demandada es la del Castillo de Santa Bárbara y el casco antiguo de Alicante. Un 36 por ciento de las excursiones contratadas tienen como destino la ciudad de Alicante y el segundo más solicitado en Benidorm, el 21 %; aunque también destaca Elche, Orihuela y excursiones a la isla de Tabarca.

Por su parte la concejala de Turismo del Ayuntamiento de Alicante, Ana Poquet destacó que “si 2023 fue un año de récord, este 2024 va a ser histórico. En escala y en cruceristas”. La edil reafirmó “la apuesta del Patronato de Turismo por los cruceros porque hablamos de un visitante con un poder adquisitivo medio-alto que además es un excelente prescriptor de destino y que puede volver en un futuro para una estancia más prolongada en nuestra ciudad”.

Poquet anunció la puesta en marcha de un sistema de código QR para agilizar la subida al Castillo de Santa Bárbara. Al tratarse de una de las excursiones más demandadas, con esta medida se pretenden evitar problemas de aglomeraciones. Con esta iniciativa, actualmente en pruebas, los turistas podrán comprar la entrada al ascensor con antelación y conocer el aforo en tiempo real. “Es una de las medidas de digitalización que se van a poner en marcha para mejorar la experiencia de quienes nos visitan”, ha explicado.

Por su parte, la concejala de Comercio y Hostelería Lidia López informó de que “el Ayuntamiento ha editado un plano que se facilita a todos los cruceristas cuando llegan a la ciudad, el cual dispone de cinco rutas a pie por las zonas comerciales y gastronómicas del centro tradicional y un QR que te lleva al directorio de comercios y establecimientos”.

Un momento de la presentación de los resultados del informe.

Un momento de la presentación de los resultados del informe. / Alex Dominguez

Asimismo, López resaltó que un total de 57 establecimientos de la ciudad ya se han adherido al sello de calidad "Alicante Cruise Friendly" que garantiza que les atiendan en inglés, aplicar descuentos especiales pago con tarjeta, campañas de ofertas en los comercios adheridos y descuentos en los establecimientos de hostelería en las cinco rutas que está visible con una placa”.

El director del Patronato de Turismo Costa Blanca de la Diputación de Alicante José Mancebo destacó que la preocupación por conocer la valoración del crucerista. "Hacemos muchas encuestas y echamos muchas veces en falta la parte de la demanda, que nos digan en caliente lo que opinan de la ciudad tras la visita. Son datos elocuentes, la valoración general del destino". En este sentido, Mancebo señaló que había tomado nota en lo que las encuestas decían sobre la falta de promoción del turismo cultural. "Nosotros hacemos reiterados esfuerzos para promocionar este tipo de oferta, pero a veces no llega dentro del barco. Tenemos que obligarnos a que antes de salir del barco los turistas sepan la ingente cantidad de cosas que se pueden hacer en materia cultural". Por ello insistió en que "las excursiones que organizamos desde el Patronato van en este sentido. Orihuela, Elche, Guadalest, las cuevas de Canelobre...". Y consideró necesario que la asociación mantenga esta línea de trabajo para seguir mejorando.

Sostenibilidad

Roberto Martínez, quiso destacar el compromiso con la sostenibilidad y el medio ambiente del turismo de cruceros. «Los cruceros suponen solo el tres por ciento de las emisiones de CO2 del tráfico marítimo de todo el mundo», dijo. En este sentido recalcó que en el sector hay un mensaje de innovación y transición energética con distintos programas. «En cinco años se construirán 62 buques de nueva generación, 38 de ellos funcionarán con gas natural licuado», explicó. En cuatro o cinco años los puertos estarán conectados a la red. El 40 % de los cruceros ya está preparado para apagar motores y conectarse a esta red eléctrica, recalcó.