Nueva vida en Altea para las vías del 'Trenet de la Marina' inaugurado en 1914

El escultor calpino Viktor Ferrando realiza una escultura de 4.800 kilos de peso, 6 metros de largo y 3,5 metros de alto con los deshechos de rieles del tramo Benidorm-Altea | La obra recibe el nombre de Atalaya Terra

El escultor Viktor Ferrando durante la inauguración de su escultura en Altea.

El escultor Viktor Ferrando durante la inauguración de su escultura en Altea. / Diego Coello Calvo

Las vías del 'Trenet de la Marina' que entró en funcionamiento en 1914 entre Alicante y Altea, y en 1915 entre Altea y Dènia, y que comenzaron a retirarse en 2003 para poner en marcha las nuevas unidades del TRAM, tienen una nueva vida tras ser salvadas de la fundición, o ser destinadas a la chatarra, para convertirlas en una obra de arte gracias a la iniciativa del escultor de Calp, Viktor Ferrando.

Altea ha sido el municipio elegido por el artista para este “renacimiento ferroviario” de los viejos rieles eliminados del tendido ferroviario entre Benidorm y Altea que, como Ave Fénix, el calpino los ha transformado en una espectacular escultura vanguardista con un peso de 4.800 kilogramos y una envergadura de 3,5 metros de alto por 6 metros de largo. La obra, ubicada en el centro de la Plaça d’Europa, frente al mar Mediterráneo y la playa de L’Espigó, ha sido inaugurada oficialmente este viernes al mediodía. Financiada por la Banca March y el Rotary Club International, esta organización la ha donado al municipio de Altea “de forma perpetua y gratuita, sin restricción de uso” con la única condición de que el Ayuntamiento “se comprometa a promover su difusión”, según reza el convenio de donación.

Atalaya Terra es el nombre que le ha puesto Viktor Ferrando a su escultura, quien ha señalado durante el acto inaugural que “representa una visión abstracta del planeta Venus, símbolo del amor y la belleza eterna”. El escultor ha indicado que “este material ferroviario de principios del siglo XX que estaba en desuso y arrinconado en un hangar de Benissa, recibe una reconversión cultural tras la donación de todo el material ferroviario que me hizo Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana en 2010. Con lo cual el patrimonio histórico de Altea, que fue parte del inicio del comercio en la provincia hace más de 100 años gracias al ‘Trenet de la Marina’, vuelve a estar a la vista de todo el mundo en esta escultura que ha recibido un tratamiento de galvanizado que evitará su oxidación y deterioro para que perdure en el tiempo”.

La escultura en Altea.

La escultura en Altea. / Diego Coello

A la inauguración han asistido miembros del Rotary Club de Calpe, del que Viktor Ferrando es miembro; el gobernador del Rotary Club, Distrito 2203, Víctor Javier Elena; y concejales del Ayuntamiento de Altea. La concejala de Cultura en funciones, Aurora Serrat, ha comenzado su parlamento agradeciendo al Rotary Club “su generosidad al donarnos esta magnífica escultura al pueblo de Altea” como parte de su compromiso “de servicio a la comunidad y el fomento del Arte y la Cultura”. La edil ha reafirmado también el agradecimiento a la Banca March “que también ha apostado por este proyecto contribuyendo a que nuestro municipio sea un lugar artísticamente estimulante para todos”, y ha aseverado que la escultura de Viktor Ferrando “tiene la capacidad de impactarnos visualmente trascendiendo las barreras y llegando a los corazones de las personas, además de provocar reflexiones y despertar la imaginación”.

Concienciación medioambiental

Aurora Serrat ha manifestado tras la inauguración de la escultura que la misma “tiene otra vertiente: la concienciación ciudadana para el cuidado del medio ambiente y el reciclado de materiales”. Así, ha declarado que se realizarán “talleres de reciclaje destinados a los niños y jóvenes, en colaboración con Viktor Ferrando y el Rotary Club, teniendo como ejemplo esta escultura hecha de material de desecho. Además de que ya hemos empezado a trabajar en una acción medioambiental de limpieza de un espacio natural como son nuestras playas y fondos marinos de la costa”.

De igual modo, Viktor Ferrando ha indicado que la escultura Atalaya Terra es la segunda de una serie de 16 que realizará con material ferroviario del “Trenet” ya en desuso: “la primera, con el nombre ‘Sol Invictus’, se encuentra en Calpe, mi ciudad natal, y allí se instaló en julio de 2022. El próximo mes se inaugurará la tercera escultura en Dènia y se instalará frente a la estación del TRAM. Después, durante este verano, será Alicante la ciudad que acogerá otra escultura. Esta, en homenaje al escritor Mario Vargas Llosa, quien ha colaborado conmigo para realizar una gran escultura vanguardista de 6.500 kilos de peso. Y así hasta 16 esculturas que se colocarán en otras tantas poblaciones del corredor mediterráneo, todas financiadas por el Rotary Club International y hechas con material reciclado de los raíles del tren que cruza la costa entre Alicante y Dènia”.