La sucesión socialista en Bruselas agita el PSPV

 El grupo joven del partido promueve la candidatura de Sandra Gómez para una lista en la que también suena Joan Calabuig

Sandra Gómez (PSPV) durante su intervención en el pleno de investidura.

Sandra Gómez (PSPV) durante su intervención en el pleno de investidura. / FERNANDO BUSTAMANTE

José Luis García Nieves

El proceso de renovación integral que se está produciendo en el PSPV abre un nueva frente de batalla. Apenas unas horas después desde que la todavía eurodiputada Inmaculada Rodríguez Piñero anunciara que se autodescartara para la candidatura de las próximas elecciones europeas, comienzan los movimientos en la plaza socialista valenciana.

Una noticia esta mañana en la Cadena Ser sitúa a la portavoz del partido en el Ayuntamiento y vicealcaldesa los últimos años, Sandra Gómez, como aspirante a la candidatura socialista. De momento, son eso, quinielas. Porque la posición oficial del partido, que coincide con la realidad, es que ni la lista está confeccionada ni las conversaciones entre Ferraz y la nueva secretaria general del PSPV, Diana Morant, han comenzada. Por no haber, no hay ni fecha para el comité federal que debe abordar las listas.

Lo que han comenzado ya son los movimientos subterráneos entre diferentes sensibilidades del partido por ocupar una posición estratégica: la de la voz del socialismo valenciano en Bruselas, cada vez más trascendente por los intereses valenciano que allí están en juego y el margen para hacer lobby en su favor. Y en la figura de Sandra Gómez coinciden varios aspectos clave.

El primero, el interés del grupo de Pelayo, como se conoce al grupo de dirigentes criado en la organización de Joves PSPV, por ocupar esta posición. También la voluntad de Pedro Sánchez de rejuvenecer los carteles electorales, además del bagaje adquirido estos años y su conocimiento del territorio. Y, por último, la que sería la predisposición de la propia Sandra Gómez, según diversas fuentes, por tomar distancia con la política valenciana tras una década como portavoz y aspirante a la alcaldía.

Sin embargo, en este momento, “todo el mundo es susceptible de estar en la lista” que todavía no existe, apunta un alto mando de la dirección. También lo sería Joan Calabuig, un nombre habitual en todas las quinielas del partido que tiene que ver con Europa y que ha sonado en algunos círculos en los últimos meses en busca de nuevo destino.

Carles Arqués

Otro nombre que suena es el del secretario comarcal de la Ribera Alta y presidente de la sección Unión de Europeístas y Federalistas, Carles Arqués, muy activo en temas del euromunicipalismo dentro de la federación valenciana. Además, junto a Rodríguez-Piñero, los socialistas valencianos cuentan con otros dos representantes en Bruselas como son Estrella Durà y Domènec Ruiz Devesa, que parten con pocas posibilidades. Especialmente la primera, mientras que en el caso del segundo puede influir a su favor su proximidad con Josep Borrell de quien ha sido asesor.

En cualquier caso, cabe recordar que la lista para las elecciones europeas es de circunscripción única para toda España por lo que el puesto que obtenga el primer representante del PSPV será un indicativo de la influencia que pueda lograr Morant en su primera negociación con Ferraz. En 2019, Rodríguez-Piñero fue la primera valenciana y ocupó el quinto puesto. En este reparto o en la elección del candidato de la federación podría influir también la paridad de si ha de ser un hombre o una mujer para cumplir con la lista cremallera.

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