El MUA, un laboratorio para cinco artistas

El Museo de la Universidad de Alicante (MUA)ha seleccionado a los artistas que desarrollarán durante dos semanas sus proyectos creativos gracias a la nueva edición, la novena, de las Residencias de Creación e Investigación Artística que se llevan a cabo en las instalaciones del propio museo.

Los cinco seleccionados abordarán sus investigaciones, que materializarán en propuestas expositivas, durante las semanas centrales del mes de septiembre, del 11 al 22, y que culminarán finalmente en una exposición ese mismo mes en el MUA.  

En la edición de este año se han recibido 32 proyectos de todo el mundo y, tras la valoración del jurado -formado por David Alpañez, Bernabé Gómez y Remedios Navarro- han elegido cinco proyectos: El camino de las diosas, de Sonsoles Masiá Sánchez; Al final del trazo, de Ángel Arias; Struktureho (Eco de la estructura), de Rubén GoMo (Radioboy); Los viajes que nunca hicimos, del colectivo CaraCoLab, compuesto por María Ponce Garrido y Ana María Salom Farre; y PlusUltra, de Lucas Selezio de Souza. 

Todos ellos reciben una beca de producción de 500 euros para llevar a término sus ideas durante las residencias y los dos últimos participantes cuentan además con una beca de alojamiento de 1.000 euros al desplazarse desde otras ciudades, una más que en anteriores ediciones.

La diversidad de los trabajos se traduce en un conjunto heterogéneo que contempla entre sus metas desde una ruta pictórica hasta la elaboración de mapas, una obra base, un relato visual y varias piezas de arte textil.

Las propuestas

Sonsoles Masiá propone en El camino de las diosas una ruta plástica a través de santuarios astronómicos ibero-romanos del litoral mediterráneo relacionados con ritos ancestrales de fertilidad. El estudio busca una «perspectiva femenina» y desarrollar «obra conectada con las esculturas prehistóricas del Mediterráneo», según avanza en su proyecto.

Desde el laboratorio de arquitectura CaraCoLab presentan un proyecto que hibrida el arte y la arquitectura plateando una serie de derivas que conecten las ciudades Alicante-Berlín en el espacio y el tiempo a partir de la práctica de caminar, para hallar similitudes y diferencias entre ambas.  El estudio lo harán a través de dibujos, ilustraciones, fotografías, grabaciones y aplicaciones móviles, además de materializarlo en mapas.

El concepto de desplazamiento también está presente en el proyecto de Lucas Seleizo, que creará una serie de seis obras con materiales textiles y técnicas tradicionales como el bordado que muestren los vínculos entre la industria textil y los fenómenos migratorios.

El fin de Ángel Arias en Al final del trazo es construir un relato visual y espacial a través del concepto de «las otras gráficas» que desafían el discurso artístico y se nutre desde el arte urbano a los petroglifos o las inscripciones medievales.

Rubén GoMo (Radioboy) se plantea crear su primera obra base para iniciarse en el circuito artístico/galerístico profesional, que será una obra escultórica, transportable, que narrará su creación y que plasmará, entre otros aspectos, su posicionamiento político y sus narrativas fantásticas.