¿Selva o pista de atletismo?

La desidia y el abandono municipal en las instalaciones de Alicante se ve reflejado especialmente en el estadio de atletismo, que actualmente luce un estado de dejadez alarmante. Lo que alguna remota vez fue una instalación acogedora y aseada, hoy se asemeja más una selva abandonada que a un lugar adecuado para la práctica deportiva. A medida que uno se adentra en sus instalaciones, la desolación y el deterioro se hacen evidentes, generando una sensación de indignación entre los usuarios y los amantes del atletismo. Así, día tras día, empeorando conforme pasa el tiempo.

Hace años, este estadio de atletismo perdió su homologación debido a su mal estado, aunque es impensable que allí se pueda realizar cualquier competición, ya que hasta las gradas no resultan seguras. Los desperfectos y la falta de mantenimiento han convertido lo que solía ser un lugar de entrenamiento de elite en un escenario inhóspito. La pista, que solía ser, antaño, una superficie lisa y apta para la práctica de carreras de velocidad y resistencia, ahora está llena de baches y hendiduras que dificultan el desempeño de los atletas además de favorecer las lesiones. Estos obstáculos no solo limitan su rendimiento, sino que también aumentan el riesgo de lesiones.

La falta de mantenimiento también ha permitido que la hierba crezca de forma descontrolada en el estadio. Lo que alguna vez fue un césped bien cuidado donde incluso entrenaba el Hércules, ahora se ha convertido en una jungla de maleza. Las líneas que solían delimitar las diferentes disciplinas atléticas apenas son visibles, cubiertas por la vegetación que ha invadido el lugar. Los saltadores de altura y longitud se encuentran con obstáculos naturales en lugar de marcas claras en el suelo. Incluso las áreas destinadas a los lanzamientos están cubiertas de maleza.

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Esta situación indignante ha llevado a muchos atletas y entrenadores a buscar alternativas fuera del estadio del Tossal. Han tenido que recurrir a pistas de otras ciudades o incluso a instalaciones privadas para poder realizar sus entrenamientos y competir en condiciones óptimas. 

El Ayuntamiento quiere poner fin a este escenario y prevé comenzar este miércoles con el arreglo del césped en una actuación de urgencia.

Toni Gallego, consciente del problema

Toni Gallego, concejal de Deportes, tiene muy claro que una de las prioridades en sus primeros días en el cargo es mejorar las instalaciones deportivas y en especial el estadio de atletismo. El edil espera que a principios de 2024 el anillo quede perfectamente restaurado para que la pista se pueda homologar y poder disputar de nuevo competiciones. Gallego no considera que la situación actual sea debido al abandono municipal, sino al hecho de que el anterior concurso quedó desierto, por lo que los plazos administrativos públicos han obligado a aguardar a un nuevo concurso para licitar la transformación del estadio de atletismo. Lo que tiene claro el edil es que hay que realizar la obra «cuanto antes».