La exportación de productos alicantinos se frena por primera vez en catorce años

Se veía venir y al final ha terminado sucediendo. Las exportaciones alicantinas retrocedieron en 2023 por primera vez en 14 años lastradas por la caída del consumo que se está registrando a nivel internacional, principalmente en los mercados europeos. La bajada ha sido del 1,3 %, hasta los 6.978 millones de euros, y se produce después de seis meses consecutivos de línea descendente. Calzado, juguete y alguna rama del metal, como el aluminio, son algunos de los sectores que más han acusado el impacto, en una dinámica que, de mantenerse, podría acabar afectando a los ritmos de crecimiento económico de la provincia, según los expertos.

Los datos publicados por el Instituto de Comercio Exterior (ICEX) confirman que las exportaciones a nivel nacional experimentaron el año pasado un retroceso del 1,4 %, situándose en 383.700 millones de euros, en una dinámica a la que no ha podido escapar la provincia de Alicante. Cierto es, como ha sucedido en el conjunto de España, que se venía del máximo histórico de 2022, cuando se alcanzaron los 7.067 millones de euros. Pero también lo es que con este retroceso se rompe la dinámica positiva que se había venido manteniendo desde 2010, último año en el que se había experimentado un retroceso en el cómputo anual.

Y el caso es que ya se veía venir, toda vez que después de una primera mitad del año en números positivos, la situación empezó a torcerse en julio, en un cambio de rumbo que ya se ha mantenido hasta diciembre, el último periodo sobre el que se han facilitado los datos. El retroceso de las exportaciones provinciales en este mes, concretamente, fue del 3,5 %, quedándose en 530 millones. La sexta caída mensual consecutiva, que ha traído consigo que, definitivamente, las ventas al exterior de Alicante hayan entrado en números rojos.

El calzado, sector exportador por excelencia, es de los que más han notado el impacto, con un descenso del 8,9 % que ha dejado la la cifra anual en 1.203,3 millones de euros. También un fabricante de bienes intermedios, como es el aluminio y sus derivados, ha sufrido un más que considerable retroceso, concretamente del 19,2 %, hasta quedarse en 316,6 millones de euros. Dentro de los sectores que caen también hay que hacer referencia al juguete, en un porcentaje del 14,6 %, lo que deja sus ventas al exterior en 101,6 millones. También las manufacturas de piedra y yeso bajan, en un 2,7 %, por lo que se quedan en 101,6 millones.

Por contra, la industria agroalimentaria ha continuado exhibiendo fortaleza, como lo demuestra la subida del 1,4 % en las frutas frescas, que deja el balance en 652,6 millones de euros, o del 14,8 % en las legumbres y hortalizas, hasta alcanzar los 555,7 millones. También las conservas de verdura o fruta crecen un 5,7 %, hasta los 310,1 millones. Otros sectores que crecen son las materias plásticas y sus manufacturas, en un 4,3 % que deja la cifra total en 461,9 millones; los componentes de vehículos y automóviles, en un 25,4 % y un resultado de 230,3 millones de euros; los aparatos y material electrónico, en un 12,2 % y 216, 8 millones; y los artículos de textil hogar, en un 4 % y 49,7 millones.

En lo que respecta a las importaciones, también han descendido, concretamente en un 6,63 %, hasta los 5.559 millones de euros, lo que deja un saldo positivo para la provincia de 1.418,7 millones de euros.

Situación

¿Y qué es lo que opinan los sectores sobre la situación que están viviendo? La presidenta da la Asociación Valenciana de Empresarios del Calzado (Avecal), Marián Cano, señala que «se ha confirmado lo que ya veníamos adelantando, en el sentido de que la inflación y la menor renta disponible por parte de las familias ha terminado afectando al consumo». El panorama, además, no es demasiado alentador, hasta el punto de que vaticina, como mínimo, otro medio año complicado.

Por su parte, el presidente de la Federación de Empresarios del Metal de la Provincia de Alicante (Fempa), Jorge Ibáñez, señala que el suyo es un sector muy variado y que, mientras a unas empresas les va bien, a otras no tanto. «Lo cierto -indica- es que el clima de incertidumbre no beneficia a nadie, y en ello va a tener mucho que ver la evolución del conflicto que hay en Gaza».

José Antonio Pastor, director general de la Asociación Española de Fabricantes de Juguetes (AEFJ), indica que el descenso final no ha sido tan acusado, debido a la fuerte reactivación de las exportaciones en el mes de diciembre. Y sobre el futuro, dice que la renta y la natalidad no van a remontar de forma significativa, por lo que apunta a la necesidad de buscar nuevos nichos de mercados, como el de los adultos.

El aumento de los costes por la crisis del mar Rojo se come el 5 % de los márgenes de la industria alicantina

Por otro lado, Luis Horcajuelo, presidente de Mármol Alicante, destaca que las exportaciones relacionadas directamente con su sector se están manteniendo, aunque muestra su preocupación por la crisis del mar Rojo que, señala, «está propiciando que tengamos un arranque de año muy flojo».

Desde la Generalitat, con todo, prefieren buscar el lado positivo. La consellera de Innovación, Industria, Comercio y Turismo, Nuria Montes, se queda con que las exportaciones en la Comunidad, que descendieron un 4,1 %, hasta los 38.014 millones, son el segundo valor más elevado de la serie histórica, solo superado por el de 2022.

Los expertos, por último huyen de lanzar un mensaje negativo, aunque advierten de los peligros que pueden llegar si la situación se mantiene. La catedrática de Análisis Económico Aplicado de la UA, Paloma Taltavull, atribuye lo sucedido a la inflación, y destaca la necesidad de buscar un equilibrio entre las rentas y los precios. Con todo, recuerda que la exportación es el motor de crecimiento económico de la provincia, y que los ritmos de creación de riqueza podrían acabar reduciéndose.

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