La venta de viviendas atenúa su caída en Alicante en el inicio del año

La compraventa de viviendas sigue a la baja en la provincia de Alicante, pero lo hace a un ritmo menor del registrado en los últimos meses del año pasado. El final de las subidas de tipos de interés y la demanda embalsada parecen haber amortiguado el descenso, y desde el propio sector se habla ya de una estabilización de cara a los próximos meses.

Así, según los datos publicados este jueves por el Instituto Nacional de Estadística, durante el pasado mes de enero se vendieron en el conjunto de la provincia 4.246 casas, lo que representa un 6,5% menos que en el mismo mes del año pasado y una caída considerablemente más abultada que la contabilizada a nivel nacional, que se quedó en el 2,1%, con un total de 54.346 operaciones.

Sin embargo, la buena noticia es que se trata de un retroceso mucho menor que el contabilizado en el cierre de 2023, cuando el número de transacciones llegó a desplomarse en diciembre hasta un 20%, de acuerdo con las mismas fuentes. Unos datos que llaman al optimismo al sector.

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"Nosotros lo que percibimos es que las cifras tienden a estabilizarse", asegura el portavoz de la Asociación de Inmobiliarias de la Comunidad Valenciana (Asicval) en Alicante, Miguel Galindo, que recuerda que los datos del INE reflejan la situación del mercado con cierto retraso, ya que desde que un cliente decide comprar hasta que se registra la operación pueden pasar un par de meses.

En este sentido, Galindo se muestra convencido de que la cifra de compraventas tenderá a mejorar en los próximos meses, a medida que los tipos de interés de los créditos empiecen a bajar y se activen algunas de las medidas anunciadas por el Gobierno para facilitar el acceso de los jóvenes a la vivienda, como los avales para la entrada. Además, recuerda que, en cualquier caso, el volumen actual de compraventas sigue siendo elevado, pese a la caída.

A este respecto, basta señalar que el dato de este enero sigue siendo el segundo mejor de toda la serie histórica del INE desde el estallido de la burbuja inmobiliaria en 2008, únicamente superado por el del pasado ejercicio, que todo el sector califica como histórico.

Segunda mano

Por otro lado, los datos vuelven a reflejar que el mercado de segunda mano es el que concentra la caída de ventas, con 3.544 operaciones, un 10,2% menos; mientras que aumenta la venta de viviendas de obra nueva, que pasan de 594 a 702 en términos interanuales, un 18% más.

A este respecto, cabe recordar que es la vivienda usada la que más sufre por el impacto del encarecimiento de las hipotecas ya que es la que recoge la demanda local de parejas jóvenes que buscan su primer hogar, los que más financiación necesitan. Por el contrario, en el caso de la obra nueva, los compradores suelen ser extranjero o familias que buscan una vivienda de reposición –para mejorar la que tienen-, que suelen disponer de la cantidad necesaria para pagarla, por lo que no se ven afectados por la evolución del euríbor. A ello hay que sumar que la mayoría de las viviendas nuevas que se escrituran ahora en realidad se vendieron sobre plano hace un año y medio o dos años, por lo que no reflejan la demanda actual.

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Valoraciones

Al igual que ocurre en Alicante, también a nivel nacional los principales portales inmobiliario ven estas cifras de enero el anticipo de un próximo cambio de tendencia en el mercado, como señalan desde Fotocasa o Pisos.com. Eso sí, un cambio de tendencia que se enfrente ahora a otro problema: la falta de oferta que empieza a apreciarse en muchos mercados, según apuntan desde Idealista. Sobre todo de demanda con las características que ahora exigen los compradores.