«En cuanto desalojen a los placeros estamos dispuestos a comenzar las excavaciones», apuntaban ayer desde Aparcisa. La empresa adjudicataria del proyecto del Mercado Central está dispuesta a comenzar con las terceras catas arqueológicas este mismo verano. La resolución del Consell sobre los restos hallados en el subsuelo del inmueble entraba dentro de los planes de la mercantil. De hecho, aseguran que ya tienen todo listo para comenzar con los trabajos de forma inmediata. Aunque el tripartito precisaba que la empresa todavía tendrá que perfilar con la Generalitat qué zonas se excavan, Aparcisa apuntaba ayer a este diario que el proyecto para estudiar qué hay en las profundidades de la zona colindante del inmueble ya está redactado. Destacan que solo falta de que los arqueólogos concreten algunos espacios con la Conselleria de Cultura. Uno de los escenarios a consensuar con la Generalitat será la superficie que deberá excavarse en la plaza de las Flores, donde hay localizado un refugio de la Guerra Civil.

Ahora, tras ese movimiento de ficha a favor de Aparcisa, la empresa tiene previsto poder comenzar las excavaciones en torno al mes de julio y paralizarlas de cara a las fiestas de agosto, con el objetivo de evitar molestias a los comercios del centro de la ciudad. Después de los actos patronales, la mercantil tiene en mente que los trabajos podrían continuar en septiembre y en ese mismo mes remitir el informe sobre las catas arqueológicas a la Conselleria de Cultura y Patrimonio.

Eso sí, el tripartito ayer se mostraba cauto en cuanto a las fechas y los plazos y advertía que ahora la empresa adjudicataria tendrá que seguir un procedimiento similar al que siguió con las dos primeras excavaciones. Uno de los trámites administrativos después de contar con la aprobación del Consell será obtener la licencia municipal para realizar las catas arqueológicas.

Más allá del proceso que se abre ahora, desde Aparcisa valoraban positivamente la resolución de la Generalitat, y destacaban que «era algo que veíamos claro desde el principio. Por eso hicimos la inversión», señalaban.

Tras superar ese escollo, desde Aparcisa también prevén que en el perímetro del Mercado Central no hayan restos arqueológicos de suficiente valor como para protegerlos y auguran que los hallazgos seguirán en la misma línea que lo que ahora se ha encontrado.

Eso sí, la mercantil también reconocía que tienen muy claro que si saliera algo de relevancia en los próximos meses su idea de derribo y de aparcamiento subterráneo quedará paralizada y que no habrá vuelta atrás.