Sanidad asegura que se ha encontrado las millonarias obras del Hospital General de Elche paradas desde hace tres meses y busca una solución

Las ambiciosas obras de ampliación del Hospital General de Elche, con un bloque quirúrgico que permitirá triplicar el espacio, llevan camino de convertirse en las del Escorial (que tardaron más de dos décadas dando lugar a la manida expresión) porque ni están ni se las espera.La Conselleria de Sanidad confirmó a INFORMACIÓN que desde junio están completamente paradas y sin visos de que se reanuden.

El equipo de gobierno del Ayuntamiento de Elche (PP y Vox), a preguntas de este diario, no ha querido pronunciarse sobre la insólita situación de un proyecto del que siempre hizo bandera el anterior alcalde, Carlos González. Responsables municipales guardan un mutismo sobre qué está ocurriendo con una de las infraestructuras sanitarias más ambiciosas de la Generalitat Valenciana en la ciudad, que promovieron el Botànic de PSOE, Compromís y Unides Podem y del que ya han sido puntualmente informados por la propia Conselleria de Sanidad.

Problemas de toda índole

El proyecto tiene problemas de toda índole que han llamado la atención del propio conseller, Marciano Gómez, quien esta semana, en una entrevista en València, al referirse a las 20.000 facturas que se han encontrado en Sanidad sin pagar de los anteriores gestores (aunque salva más a Miguel Mínguez que a Ana Barceló sobre la gestión), puso solo dos ejemplos de asuntos peliagudos que hay sobre su mesa: el Hospital General de Elche y al de Ontynient. En ambos, dijo, hay "importantes dificultades".

El titular del área se refería, y así se lo ha hecho saber a preguntas de este diario, pero también se lo ha dicho a los responsables municipales, entre ellos al alcalde Pablo Ruz o la edil de Sanidad, Inma Mora, al quebradero de cabeza en el que se ha convertido esta obra. En la última actuación presupuestaria se disparó a 17,1 millones de euros, cantidad que se autorizó por el Consell días antes de las elecciones municipales y autonómicas, concretamente el 19 de mayo. El proyecto, como se recordará, nació con un presupuesto que ahora parece irreal de 6 millones de euros en enero de 2019 y presentado por el propio Ximo Puig, quien dijo aquel día esta frase "el Hospital General de Elche es un ejemplo paradigmático de lo que ha sido el cambio en la Comunitat Valenciana».

Una actuación muy particular

Pero en febrero de 2020, un año más tarde, cuando el entonces president acudió a Elche para anunciar el inicio ya aseguró que costaría casi el doble de lo inicialmente previsto, 11,4 millones. Esto lo justificó por la complejidad propia que presenta un proyecto de estas características, lo que generaba una "serie de condicionantes que lo hacen una actuación muy particular". Las obras, en cualquier caso, no arrancaron hasta mayo de 2021.

Ubicación

Y, aunque todo eso se sabía cuando se dijo que costaría 6 millones de euros un año antes, porque no ha cambiado nunca de ubicación, Puig aludió para justificar que fuera a costar casi el doble por la falta de espacio disponible en una parcela pegada a huertos de palmeras protegidos de la Unesco, lo que obligaba a desarrollar la actuación en altura, salvando la cubierta de uno de los edificios del hospital (bloque norte) con una estructura independiente de grandes luces, resistente al sismo. Precisamente esta ubicación ha condicionado todo al situarse pegada al perímetro de protección del Palmeral de Elche porque, además, obligaba a la integración paisajística del conjunto, "lo cual se conseguirá dando una apariencia neutra y sobria a la ampliación". Todo ello en mitad de las críticas de colectivos como Salvem el Palmerar por la afección al mismo.

"Administrativos y técnicos"

Desde el departamento de Marciano Gómez explicaron al diario que no solo se han encontrado tras su llegada a Sanidad, "graves problemas administrativos y técnicos", como consideran que son la necesidad de un uso de tecnologías avanzadas y sistemas constructivos prefabricados o problemas sobrevenidos como inundaciones o los sótanos, a los que ya se refirió en febrero de este año el entonces conseller Mínguez en una visita al Hospital en la que se dio cuenta de la envergadura del problema y de esa necesidad de aumentar el presupuesto en otros seis millones, además de anunciar mejoras como el robot Hugo, ya en funcionamiento.

El nuevo equipo de Sanidad que dirige Marciano Gómez asegura al diario que se ha encontrado " con problemas que han ocasionado esta paralización y que son de diferente índole, empezando por el planteamiento de una solución de gran complejidad técnica y alto coste económico ante un problema de falta de espacio, lo que unido a una deficiente gestión económica y administrativa del equipo anterior ha terminado produciendo la paralización de la misma". Más claro es difícil de exponer.

Buscando soluciones

Ahora, desde la Dirección General de Infraestructuras de la Conselleria de Sanidad se está trabajando para encontrar soluciones a los diferentes problemas que se han encontrado y que la ampliación del hospital pueda ser una realidad. Ahora bien, algunas fuentes no descartan el hecho de que se rescinda con la empresa y se inicie un replanteamiento completamente nuevo de la situación.

Si en 2020 el plazo de ejecución era de 30 meses pues Puig, como vino a presentar las obras, dijo que estaría funcionando en agosto de 2023 y Mínguez el pasado febrero ya dijo que se atrasaría hasta diciembre de 2024. La realidad es que nadie se atreve ahora a poner fechas y el Hospital lleva camino de ser el nuevo Escorial del retraso.