La Policía Local de Villena intensificó durante la pasada noche las medidas de vigilancia en los puntos conflictivos de la localidad donde pudieran producirse peleas entre jóvenes españoles y sudamericanos en respuesta a la batalla campal ocurrida el pasado miércoles. El pasado viernes, efectivos de las fuerzas de seguridad ya actuaron como medida de presión para evitar que las inmediaciones de un local frecuentado por jóvenes latinoamericanos se convirtiese en un nuevo escenario de enfrentamiento.

Algunos estudiantes del IES Hermanos Amorós, afines al joven que sufrió la peor parte de la agresión al recibir un botellazo, avisaron de que el asunto no se daba por zanjado, lo que obligó a las fuerzas de seguridad, durante los días posteriores al incidente, a intensificar el control en las horas de salida del instituto para evitar que algunos menores protagonizasen nuevos incidentes. Los hechos se remontan a la tarde de miércoles, cuando se produjo una reyerta entre jóvenes sudamericanos y estudiantes procedentes del centro educativo. A pesar de la intervención de las fuerzas de seguridad, uno de los jovenes quedó lesionado al recibir el impacto de una botella. La juez de Menores de Alicante ordenó el internamiento cautelar, en régimen semiabierto, para dos de los cuatro menores detenidos por su presunta participación en la pelea, que ya tenían antecedentes, por provocar lesiones con instrumentos peligrosos.